La literatura científica y las estadísticas penitenciarias ponen de manifiesto que el nivel educativo medio de la población reclusa está muy por debajo de la media respecto de la población general, siendo la tasa de analfabetismo significativamente mayor en prisión y la posesión de titulaciones académicas básicas significativamente menor. Con un añadido muy relevante en nuestro caso, y es que la brecha es todavía mucho más marcada si tomamos como referencia únicamente a la población reclusa femenina.

La Escuela asume como el primero de sus objetivos que las alumnas avancen en el cálculo matemático elemental y adquieran o amplíen el gusto por la lectura y la escritura. Pretendemos que nuestras alumnas sean capaces de calcular, hablar, leer y escribir correctamente, base fundamental para alcanzar competencias clave.

El Plan para el fomento del Cálculo, la Oratoria, la Lectura y la Escritura (COLE) se configura así como uno de los pilares sobre los que gire la acción educativa del Centro y sus áreas de mejora.