En el cuento que da título a este libro, un gato callejero entra a un estudio y ocupa el lugar que dejó la tortuga. Así nos ocurre con Rīchi Yokomitsu, que con estos cinco relatos se cuela, tan desconocido como despreocupado, por entre los grandes sabios para reclamar el espacio que por derecho también le pertenece.

Yokomitsu carece de misericordia, pero su personajes están plenos de compasión; paranoia y generosidad van de la mano. La primavera llegó en un carro tirado por caballos en un libro conmovedor, casi epifánico, sobre los padecimientos ajenos y propios, muchas veces autoinfligidos.

Acompañados por un prólogo a cargo de Miguel Sardegna y obituario que le dedicó Kawabata as su querido amigo, nos adentramos a este autor con la certeza creciente de tener entre las manos a un nuevo clásico, en esta traducción directa del japonés que incluye relatos jamás traducidos antes.