HERNIAS ABDOMINALES
HERNIAS ABDOMINALES
Una hernia abdominal es un saco que se forma con la salida repentina o permanente de un órgano o contenido, a través de las zonas menos resistentes de la pared abdominal, por orificios anatómicamente constituidos que se debilitan ya sea por causas congénitas o por causas adquiridas.
Entre las causas adquiridas mencionadas encontramos, por ejemplo:
- Esfuerzos prolongados.
- Obesidad.
- Embarazos.
- Actividades o patologías que eleven la presión dentro del abdomen, entre las que tenemos: estreñimiento crónico, toses crónicas o estornudos, fibrosis quísticas, el agrandamiento de la próstata (esfuerzo para orinar), los líquidos en el abdomen (ascitis), diálisis peritoneal, la desnutrición, el tabaquismo, o la criptorquidia, que consiste en que los testículos que no descienden.
¿CÓMO DETECTARLAS?
Entre sus síntomas están el dolor, hinchazón y enrojecimiento de la región, sobre todo cuando hay un encarcelamiento, torsión o se estrangulan los órganos dentro de la hernia, así como náuseas y vómitos ligados a éstos.
Generalmente, el contenido del saco herniario entra y sale, causando una pequeña molestia. Sin embargo, cuando el orificio del paso de los órganos queda más estrecho, se puede encarcelar o estrangular el órgano, llevando a complicaciones.
TIPOS:
Hernia Inguinal:
Se encuentran localizadas sobre el pliegue inguinal, por fuera del pubis. Constituyen el 85% de los diagnósticos de hernias, siendo las más frecuentes en hombres.
Hernia Umbilical:
Está sobre la región de la cicatriz umbilical. Son el 10% de los casos de hernias. También se dan en lactantes raramente se estrangulan y no reciben tratamiento, desaparecen sin tratamiento en unos años. Son las más frecuentes en mujeres.
Hernia Epigástrica:
Se sitúan entre la apófisis xifoides y el ombligo, en la línea media (línea blanca).
Hernia Crural:
También se conocen como hernias femorales. Se encuentran por debajo del pliegue inguinal, en el inicio del muslo.
SOLUCIÓN:
La cirugía es el único tratamiento con el que se puede reparar una hernia abdominal de manera permanente, para impedir que su evolución natural lleve a su agrandamiento o atascamiento (su peor complicación), que obliga a la realización de una cirugía de urgencia.
Sólo en algunos casos, como en las hernias pequeñas o las hernias en el bebé (umbilical) no es necesaria esta solución, ya que se resuelven solas.
La operación se practica en un centro quirúrgico, con anestesia local o raquídea, y con la apertura del abdomen o por laparoscopia, durando en total alrededor de 1 hora. En ella los órganos son empujados y reintroducidos en el interior del abdomen, cerrando después con sutura.
Aquí tenemos un pequeño vídeo en el que resume parte del contenido:
BIBLIOGRAFÍA:
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