Qué es el infarto agudo de miocardio
Definición de infarto de miocardio
El infarto de miocardio, también llamado trombosis coronaria y es mayormente conocido como "ataque al corazón". Este término se refiere a la necrosis de una porción del músculo cardíaco causada por la obstrucción del flujo sanguíneo en unas de las arterias coronarias, y por lo tanto, se causa una falta de oxígeno. Por definición, la palabra infarto significa "necrosis por falta de riego sanguíneo", mio se refiere a "músculo" y con cardio a "corazón". Las manifestaciones del infarto aparecen de forma súbita, y el riesgo de muerte o complicaciones graves a corto plazo es elevado. Además, la eficacia del tratamiento va a depender, en gran medida, del tiempo transcurrido desde el inicio de los síntomas hasta su administración.
Los síntomas
Los síntomas de esta enfermedad son variados: dolor de pecho aplastante en la izquierda del pecho, pérdida del aliento, la piel pegajosa, sudada y gris, y mareos. También puede tener náusea, vómitos, agitación, tos y malestar general.
Tanto hombres como mujeres padecen la enfermedad, aunque en personas menores de 50 años este padecimiento es más frecuente en hombres. Por encima de los 50 años, la incidencia en hombres y mujeres es la misma, aclaró el experto.
Causas del infarto de miocardio
La enfermedad que está detrás del infarto de miocardio es, de forma casi invariable, la arteriosclerosis avanzada de las arterias coronarias. El músculo cardíaco necesita constantemente de un abundante suministro de sangre rica en oxígeno para llevar a cabo la tarea del bombeo de sangre, suministro que le llega a través de la red de arterias coronarias. Cuando se erosiona o se rompe una placa de ateroma en la pared de una arteria coronaria, rápidamente se forma sobre ella un trombo que puede llegar a obstruir de forma completa y brusca la luz de la arteria, interrumpiendo el flujo sanguíneo y dejando una parte del músculo cardíaco sin irrigación. Cuando esto sucede, esa parte del corazón deja de contraerse.
Los factores que aumentan el riesgo de un infarto son: el envejecimiento, el consumo de tabaco, el sobrepeso, la obesidad y la tensión arterial alta. Otros factores son: tener un nivel de colesterol alto en la sangre, diabetes, antecedentes familiares de infartos de miocardio y la falta de ejercicio físico regular. El riesgo de un infarto también aumenta si se tiene angina de pecho, o si ya ha tenido un infarto o le han operado del corazón.
El tratamiento
Durante el infarto, se debe acudir rápidamente al médico puesto que habrá una mayor probabilidad de poder tratar con éxito al paciente y, por ende, de sobrevivir. Si el paciente responde correctamente a los estímulos, deberá comenzarse inmediatamente el tratamiento de reanimación cardiopulmonar.
Si el corazón se ha detenido, es decir, el paciente ha sufrido un paro cardiaco, el equipo médico tratará de reanimarlo usando un aparato denominado desfibrilador. Con esto se envía un electrochoque al pecho para que el corazón vuelva a latir. Si se tiene un infarto de miocardio, generalmente se da una dosis única de aspirina para evitar que el coágulo de sangre que hay en la arteria coronaria se haga más grande.
Después de un infarto de miocardio, es posible que deba tomar varios medicamentos para reducir el riesgo de tener otro infarto, como:
- Los antiplaquetarios contribuyen a reducir la “pegajosidad” de las plaquetas. Esto evita el infarto de miocardio, puesto que las plaquetas son menos propensas a pegarse a los depósitos grasos del interior de una arteria para formar un coágulo.
- Los betabloqueantes contribuyen a proteger el corazón después de un infarto. Hacen que el corazón lata más lentamente y con menos esfuerzo para reducir el volumen de trabajo que debe realizar.
- Lo inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (ECA) abren los vasos sanguíneos y bajan la tensión arterial para aliviar la carga del corazón.
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Bibliografía:
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Cardio Alianza. (2018, 8 mayo). Infarto de Miocardio: qué es, causas, síntomas y tratamiento | Cardioalianza. https://cardioalianza.org/las-enfermedades-cardiovasculares/infarto-de-miocardio/
Las arterias coronarias rodean el corazón en toda su superficie externa. Su función es la vascularización del músculo cardiaco. Son dos y se originan en la aorta.
Es un coágulo sanguíneo que se forma en un vaso y permanece allí.
Es una afección en la cual placa, o sustancia pegajosa compuesta de grasa, colesterol, calcio y otras sustancias que se encuentran en la sangre, se acumula dentro de las arterias. Con el tiempo, esta placa también llamada ateroma se endurece y angosta las arterias. Eso limita el flujo de sangre rica en oxígeno.
Dolor de pecho o malestar debido a la falta de oxígeno en el corazón.
La reanimación cardiopulmonar consiste en un masaje cardiaco mediante 30 compresiones de pecho por cada dos insuflaciones de aire boca a boca.
Son pequeñas partículas de la sangre que contribuyen a su coagulación.