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Dossier sobre la desertificación y la desforestación

2.2.1 2.2 2.3 2.4 Lucha contra la desertificación

2.- Lucha contra la desertificación.

Cada 17 de junio, se celebra un día llamado "lucha contra la desertificación" y en él, se llevan a cabo estas tres ideas: La prevención o la reducción de la degradación de las tierras, la rehabilitación de tierras parcialmente degradadas y la recuperación de las tierras desertificadas.

2.1- Incrementar la capacidad de respuesta de la población. 

A lo largo del siglo 20 la población se ha más que cuadruplicado, ésta sigue aumentando en unos 80 millones cada año, por lo que puede duplicarse de nuevo en pocas décadas. La Comisión Mundial del Medio Ambiente y del Desarrollo ha señalado las consecuencias como por ejemplo en muchas partes del mundo, la población crece según tasas que los recursos ambientales disponibles no pueden sostener, tasas que están sobrepasando todas las expectativas razonables de mejora en materia de vivienda, atención médica, seguridad alimentaria o suministro de energía”.

Alrededor de un 40% de la producción fotosintética primaria de los ecosistemas terrestres es usado por la especie humana cada año para, comer, obtener madera y leña, etc.

Puede decirse que hemos superado ya la capacidad de carga del planeta, es decir, la máxima cantidad de seres humanos que el planeta puede mantener de forma permanente. De hecho se ha estimado en 1,7 hectáreas la biocapacidad del planeta por cada habitante mientras que en la actualidad la huella ecológica media por habitante es de 2,8 hectáreas.

Cerca de una tercera parte de los empleadores ya tiene dificultades en cubrir puestos de trabajo, debido a que no encuentran candidatos con las competencias necesarias. Uno de los factores clave para la discrepancia entre las competencias es hacer que el mercado laboral sea más sensible a los cambios tecnológicos, a los desafíos ambientales y del cambio climático, al comercio y a la competitividad.

2.2- Mejorar la gestión de la Tierra.

El planeta pierde, cada año, 15.000 millones de árboles y 24.000 millones de toneladas de tierra fértil. La degradación de la tierra y la sequía son desafíos mundiales íntimamente ligados a todos los aspectos de la seguridad y el bienestar humano, en particular con la seguridad alimentaria, el empleo y la migración

Los pequeños agricultores, las mujeres y las comunidades indígenas son los más vulnerables dada su dependencia a los recursos terrestres, agravada por su exclusión de una infraestructura más amplia y el desarrollo económico.

Hay un proyecto el cual tiene como objetivo mejorar la sostenibilidad de la gestión de tierras agrícolas y boscosas mediante la difusión y adopción de tecnologías de bajo carbono, contribuyendo a combatir la degradación del suelo y el cambio climático, y a conservar la biodiversidad, incrementando la rentabilidad de las fincas agrícolas y la productividad de los bosques.

2.3- Restaurar la Tierra.

En el planeta, hay más de 2.000 millones de hectáreas de tierras deforestadas y degradadas que podrían restaurarse. En los últimos 10 o 20 años, la prioridad ha sido gestionar las tierras agrícolas productivas y evitar la deforestación. El continente más afectado es África.La restauración del paisaje forestal es un proceso a largo plazo para recuperar los bienes, servicios y procesos ecológicos a escala de paisaje.

Durante los últimos siglos hemos utilizado combustibles fósiles como el carbón y el petróleo para suplir las necesidades energéticas de nuestras sociedades industriales, profundamente dependientes del automóvil. La combustión despide gases de invernadero como el dióxido de carbono y el metano a la atmósfera. Este fenómeno contribuye al calentamiento global y a los cambios violentos en el clima. Los glaciares del mundo se están derritiendo y los casquetes polares se adelgazan y encogen. En los últimos 40 años, la Tierra ha perdido el 10 por ciento de su capa de nieve.

El exceso de población, el pastoreo excesivo, la pesca excesiva, la erosión del suelo, la deforestación, la contaminación, la destrucción de hábitats y la extinción de especies son factores que influyen en la crisis ecológica.

2.4- Controlar la erosión.

La erosión del suelo es una grave amenaza a escala mundial para la sostenibilidad de los ecosistemas agrícolas y la productividad de la tierra.Los radionucleidos procedentes de precipitaciones radiactivas y los isótopos estables se utilizan para determinar la magnitud y las fuentes de la erosión del suelo, que pueden controlarse mediante prácticas eficientes de conservación del suelo.
Actualmente, la degradación del suelo afecta a 1900 millones de hectáreas en todo el mundo, lo que representa aproximadamente el 65 % de los recursos edáficos del planeta. La erosión del suelo es responsable del 85 % de esa degradación, es el factor que más contribuye a ella.

Aproximadamente 1500 millones de personas, es decir, la cuarta parte de la población mundial, dependen directamente de la producción de alimentos de tierras degradadas.

Los sistemas agrícolas de todo el mundo pierden al año más de 36 000 millones de toneladas de suelo fértil a causa de la erosión del suelo. El costo económico asociado a la erosión del suelo dentro y fuera de las explotaciones agrícolas se estima en 400 000 millones de dólares de los Estados Unidos al año.

La agricultura intensiva y la deforestación son importantes causas de la degradación de la tierra, que lleva aparejada la erosión del suelo y deja grandes zonas expuestas a la pérdida de la capa fértil. Ello, junto con la pérdida de los nutrientes y de las sustancias químicas asociadas a las masas de agua, constituye una grave amenaza para la producción agrícola sostenible, la protección del medio ambiente y la seguridad alimentaria en muchas regiones del mundo.

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