Saltar al contenido

Visor

APRENDER: Una aventura emocionante

Vivimos cada día una “aventura emocionante” que facilitará el desarrollo socioemocional de nuestros alumnos, las ganas de aprender, crecer con ilusión y proyección hacia el futuro.

Sonia González
Directora del CEIP Aldebarán (Tres Cantos)

El Colegio Público Aldebarán de Tres Cantos cumple 25 años y nos sentimos muy felices porque conseguimos que nuestros niños y niñas brillen incluso más que la estrella que da nombre a nuestro centro.

El objetivo fundamental de la educación es el desarrollo integral de la persona. La escuela tendrá que facilitar un adecuado desarrollo cognoscitivo, socio-afectivo y emocional.

Para todos los que formamos parte de esta gran familia supone una enorme satisfacción observar el resultado conseguido con el trabajo de todos unidos, una escuela inclusiva en la que la diversidad en un valor añadido. Una escuela democrática y dialogante en la que respetamos, valoramos y apoyamos a cada uno con sus características individuales y reforzamos el sentimiento de pertenencia e identidad con el grupo.

El trabajo ha sido muy fácil, somos un gran equipo, siempre nos enfrentamos a los éxitos y tropiezos con humildad recogiendo lo positivo y empleando “el poder de las palabras” para superar las dificultades. Analizamos, hablamos, rectificamos, y avanzamos.

El Aldebarán es reconocido como referente en Educación Inclusiva, Convivencia, Participación y tratamiento de la Competencia afectiva y socioemocional que son precisamente los pilares de nuestro Proyecto Educativo.

Todos crecemos juntos cada día, nos contagiamos de la ilusión por enseñar y aprender, disfrutamos en el colegio, señalamos nuevos retos , nos emocionamos.

Sin emoción no hay educación. Sin ilusión no hay futuro

Y nuestra puerta siempre está abierta. Somos aventureros, nos lanzamos a explorar nuevas propuestas, a investigar y compartir experiencias. Hemos participado en 7 proyectos europeos (Comenius, Erasmus+) y 4 programas de cooperación entre centros educativos en España (Arce, Promece, mentorización y acompañamiento). Con ellos reflexionamos sobre nuestra propia identidad, incorporamos buenas prácticas educativas e iniciativas metodológicas activas e innovadoras que motivan, ilusionan, contribuyen a la cohesión del equipo, propician la crítica y valoración y ofrecen nuevas estrategias para observar, actuar y anticiparse a los conflictos para prevenirlos o resolverlos de manera inmediata.

Si como maestros nos entusiasma nuestra profesión, nos emocionaremos cada día en la escuela. Somos conscientes de nuestra responsabilidad y compromiso. Tenemos en nuestras manos a los niños y niñas que las familias y la sociedad nos confían. Formamos a los ciudadanos del futuro y tenemos la oportunidad de actuar para que ese futuro sea mucho mejor, más tolerante, libre, democrático, una sociedad que aprecie y viva con los valores personales y sociales que tratamos de transmitir.

Trabajamos con un material humano muy sensible con el que convivimos y al que aportamos nuestro granito de arena para conseguir que sean buenas personas, que “crezcan”, que sean felices y para ello debemos facilitar el mejor entorno posible de aprendizaje,

Cada día nos lanzamos a un nuevo capítulo de la aventura emocionante de Educar, unida de manera inseparable a la Aventura de Aprender.

Y es aventura porque nada está escrito, nosotros (profesores-alumnos) somos cada día los protagonistas, nos lanzamos con valor, somos valientes y valiosos, nos esperan sorpresas y momentos sorprendentes, emocionantes que van escribiendo nuestra historia, dan sentido a la vida y nos animan a continuar o nos desilusionan.

En este trayecto vamos a encontrar días felices, productivos en los que avanzamos con buen ritmo y hay un buen progreso con lo planificado para nuestras clases y, de pronto, aparece un bache, un charco, que tendremos que salvar, necesitamos en esos momentos contar con los recursos que nos permitan retomar el rumbo y continuar.

Estos factores son fácilmente reconocibles. Llegamos a clase e iniciamos las actividades preparadas en la  programación diaria y entonces surge lo imprevisto: falla el ordenador, no conseguimos conectar tampoco con los alumnos - hoy están como el día. Uno llora, tres no han traído los materiales y otro le acaba de romper la hoja al compañero en un arrebato de ira… La situación de clase ha cambiado en un minuto.

Aprender. una aventura emocionante

Nuestro lenguaje corporal lo dirá todo y decirlo también es importante.

Expresamos nuestras emociones: Sentimos y hacemos que los que los otros también sientan. Comunicamos y compartimos nuestra alegría, nuestra preocupación y nuestra inquietud. Nos queremos y nos enfadamos, decimos lo siento, damos abrazos (de piña, de oso, del revés, …) Escuchamos, apoyamos, acompañamos, empatizamos. Estamos atentos, somos sensibles, somos nosotros, cada uno, con sus características y sus momentos. Somos únicos y necesarios – somos todo y parte de Aldebarán.

Y también todos necesitamos ser reconocidos y apreciados. Transmitimos que todos nos importan, tratamos de que todos reciban cada día un comentario, un guiño, una sonrisa, unas palabras agradables, los saludos… Amabilidad, aprecio, respeto, valoración, apoyo, simpatía, afecto, sentimiento, espontaneidad, creatividad, expresión… palabras indispensables.

Y, cuando releemos, revivimos, convivimos, … vivimos la escuela al tiempo que nuestra propia vida nos sentimos genial o preocupados, enfadados, tristes, eufóricos, …

Estos mismos sentimientos tienen todos los que forman parte de la Comunidad Educativa y son emociones variables, imprevisibles, que influyen continuamente en nosotros y en los demás,  que son naturales y necesarias.

Emociones que hay que reconocer en nosotros mismos y en los otros, valorarlas, manejarlas y ayudar a los demás a hacerlo.

Cuando reconocemos el valor de las emociones, nos damos cuenta de que van unidas a otra serie de valores innatos en cada uno y en la sociedad. Necesitamos identificar  las fortalezas personales y saber cuáles son nuestras debilidades.

Aprender. una aventura emocionante

Conocer y regular esas fortalezas facilita nuestro buen desarrollo a nivel cognoscitivo, socioafectivo y emocional y favorece no sólo el aprendizaje sino las ganas por aprender.

Tras reflexionar y reconocer que los diferentes estados emocionales nos afectan a todos tanto a nivel individual (profesores, alumnos, familias, ..) como a nivel de grupo-clase, equipo didáctico, comunidad escolar y su relación directa con la actividad educativa. Hablamos del tratamiento de la competencia emocional en la escuela.

NO enseñamos emociones, trataremos de aprender a identificarlas y a manejarlas. Todas, las positivas y las negativas son necesarias y no tenemos que anularlas, debemos sentirlas y conseguir regularlas para poder crecer como persona de manera equilibrada.

NO ofrecemos una clase específica de educación emocional, los sentimientos, afectos, emociones y relaciones son variables y aparecen de pronto aunque también podemos provocarlas y estar preparados,  atentos para que cuando surge lo inesperado, sepamos reaccionar y reconducir las situaciones difíciles, desagradables, conflictivas o  disfrutar y compartir los buenos momentos.

Entonces ¿qué hay en el Aldebarán que pueda interpretarse como buenas prácticas en educación emocional?

En Aldebarán siempre hemos sido así, con una personalidad propia y distintiva y siempre tratando de incorporar nuevas estrategias de mejora con la participación en proyectos de cooperación. Han sido los profesores de otros centros los al observarnos han destacado actuaciones que siempre creímos habituales en cualquier centro y nos han hecho conscientes de nuestros propios valores.

Nos dicen que al entrar en Aldebarán se nota algo especial que sienta bien y es contagioso.

Nuestra actitud no es fruto de la improvisación o simple espontaneidad. Hemos participado en muchas actividades de formación e investigación y agradecemos a Marina Criado, nuestra orientadora durante muchos años, todo lo que nos ha aportado.

Reconocemos que la implicación de todo el Claustro en los diferentes proyectos ha contribuido a establecer unas excelentes relaciones profesionales y personales que facilitan el trabajo, fomentan el diálogo e intercambio de ideas y experiencias, el espíritu crítico y el autoconocimiento, refuerzan nuestra autoconfianza y autoestima, la valoración y el respeto por nosotros mismos y de los demás.

Normalmente al hacer autocrítica es más fácil que comentemos factores en negativo a mejorar y nos cuesta lanzarnos flores. El pensamiento positivo reforzará y el reconocimiento de nuestros valores facilitará los instrumentos en los que apoyarnos para superar las dificultades. Ambos elementos son necesarios para conseguir el equilibrio, ir atentos para observar las dificultades que se presenten en nuestro camino y avanzar, siempre mirando hacia adelante (si volvemos la vista y aparece un bache podemos tropezar y caer)

Para actualizar y reconocer nuestra situación realizamos con frecuencia un análisis DAFO que facilita la información sobre aquellos aspectos positivos y negativos de origen interno y externo que constituyen para el centro fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades.

Aprender. una aventura emocionante

La participación en Programas Oficiales facilita el reconocimiento público de nuestras actuaciones pero también la dotación de recursos económicos extraordinarios que nos permiten adquirir material didáctico para cubrir nuestras necesidades y desarrollar las actividades previstas.

Estos programas favorecen la movilidad del profesorado en visitas y reuniones de estudio que proporcionan una visión amplia de la realidad educativa en otros centros para comparar, compartir e incorporar propuestas didácticas atractivas y de éxito. Actividades Intercentros que inciden directamente a nivel individual y como equipo didáctico con una actitud abierta, activa, flexible, adaptativa, motivadora e ilusionante.

Todos estos sentimientos se transmiten y comparten en la Comunidad Educativa haciéndonos corresponsables colaboradores para tratar de ofrecer lo mejor a nuestros niños y niñas.

Es muy importante incidir en identificar a Aldebarán como Comunidad Educativa.

La convivencia y participación de todos los miembros es fundamental para lograr que el desarrollo socioafectivo y emocional funcione y, por consiguiente, facilite el aprendizaje de conocimientos y la adquisición de las competencias básicas que aplicaremos en el colegio y por extensión en cualquier otro contexto.

La colaboración, el respeto y confianza mutua entre todos facilita nuestra tarea y da seguridad a los alumnos. Si todos conocemos y trabajamos los objetivos, si somos capaces de coordinarnos, si afrontamos juntos las dificultades y disfrutamos de los éxitos, los resultados compartidos serán mucho mejores. Los principales beneficiarios serán los niños y las niñas pero también satisfacen y emocionan a todos los que participan.

Aprender. una aventura emocionante

Si formamos parte de Aldebarán se nos abre la gran puerta a participar y disfrutar. Nos encanta que no sólo el profesor entre en clase, las aportaciones activas de otros (compañeros -alumnos y profesores, padres, abuelos, colaboradores) que  contribuyen a dinamizar, motivar, mejorar la transmisión de conceptos, a afianzar actitudes y a compartir emociones.

El principal objetivo ha sido siempre  sentirnos bien en el cole, cuidar las relaciones personales y ofrecer el mejor entorno de aprendizaje, un lugar en el que nos sentimos seguros, con confianza, como en casa.

Cuidamos el entorno físico en aspectos de seguridad pero también hacemos que sea atractivo, muy agradable, cómodo. Cuidamos mucho la decoración, incorporación y distribución de los espacios y del mobiliario . Los elementos decorativos sirven también como motivación o expresión de los proyectos que trabajamos. Queremos que el colegio sea acogedor con rincones para el bien-estar:

  • No necesitamos hacer filas ni utilizar sirenas para las entradas y salidas, nos acompaña la música.
  • El patio es un elemento importante. Una comisión (profesores/familias) se encarga de mantenerlo e incorporar nuevos elementos que lo hagan atractivo y propicien la interacción de todos (juegos, pizarras, rocódromo, mesas de picnic, bibliopatio, toldos, caseta de juegos, huerto escolar, …)
  • Hay muchos rincones y elementos que invitan a los niños a charlar, leer, estar tranquilos, jugar... expresar sus emociones, resolver sus conflictos..
    • Hay un aula multiactividad – multisensorial concepto snoezelen
    • Rincones de tranquilidad / Rincón de la Ira / árbol de las palabras dulces / buzones de sugerencias
    • Simplemente una alfombra y tres cojines en un pasillo son una buena idea.

Entonces, para que todo funcione, para entender que convivimos en una escuela sistémica, identificamos otros elementos básicos en el proceso enseñanza aprendizaje para lograr el resultado previsto: 

-       Todos y cada uno somos importantes y únicos

-       Todos pertenecemos al grupo y nos necesitamos

-       El engranaje, la unión de todos , refuerza, motiva y permite el funcionamiento de la escuela.

Aprender. una aventura emocionante

Los agrupamientos también son flexibles. Nos encanta la interacción entre diferentes alumnos y niveles, actividades interactivas que favorecen la tutorización entre iguales, la responsabilidad y el respeto , la imaginación, espontaneidad y el desarrollo de habilidades sociales.

Siempre muy atentos y sensibles para detectar lo que pasa y actuar si es necesario.

Cuando algo falla, hay que resolverlo inmediatamente o el motor sufrirá una avería que impedirá que el resultado sea el deseado.

Aprender. una aventura emocionante

Tenemos previstas intervenciones para anticiparnos o resolver conflictos: El señor NO, el poder de las palabras, Peacemakers, palabras dulces, sillas de la boca/oreja, decálogo del Buen Mago, piedra habladora, aplicación de programas de prevención (agente tutor, sociescuela,…), el almacén de buenos momentos, cariñogramas, socioemociogramas, radraténticos, botes de lágrimas o un puchingball …

Aunque el tratamiento de la competencia emocional está presente continuamente hay ocasiones especiales a lo largo del curso en las que, de manera específica, incidimos sobre algunas de las fortalezas personales:

  • Comienza el curso y nos reencontramos o presentamos. Somos únicos y especiales. Tenemos el apoyo de nuestra familia.
  • Nos incorporamos al grupo, necesitamos acordar las normas, elegimos a los Peacemakers como portavoces y mediadores en los conflictos.
  • Nada mejor que Halloween para proponer la semana de los Valientes y mostrar nuestro coraje.
  • En Navidad es el momento de la alegría, la ilusión, la sorpresa.
  • Junto a la celebración del día de la Paz y la no violencia trabajamos la ira
  • Por San Valentín damos valor al cariño, la amistad.
  • En Carnaval es el momento de enfrentarnos a la timidez, ser espontáneos y entender el sentido del humor.
  • Ante la época de exámenes nos regalamos trucos para aprender, afloran los talentos personales.
  • Con la fiesta del cole reconocemos nuestra identidad y el sentimiento de pertenencia al grupo.
  • Y en cualquier momento, cuando es necesario hay que afrontar situaciones inesperadas que requieren atención, empatía y una respuesta: Cómo afrontar una separación, una enfermedad, el duelo por un ser querido, un traslado, la llegada de un nuevo hermano, …
  • A diario facilitamos que los niños puedan expresar sus sensaciones o sentimientos. La asamblea en infantil , 1º, 2º y en cualquier otro momento necesario o nivel de primaria, permite decir en voz alta cómo me siento hoy y qué me pasa. Al mismo tiempo trabajamos la expresión oral y la interacción.

También hemos comprobamos que escribir o dibujar lo que sucede o nos preocupa, ayuda a desahogarnos y reflexionar. El gesto de tirar o intercambiar los papeles facilita la comunicación y siempre  es positivo.

Aprender. una aventura emocionante

En nuestro blog aparecen algunos ejemplos de las actividades que realizamos y su conexión con el tratamiento de la competencia emocional.

¡Qué emoción!: http://novedades-aldebaran.blogspot.com/p/que-emocion.html

En el Proyecto Smile hemos publicado un manual de Buenas Prácticas que ofrece  muchas propuestas concretas de actividades para el tratamiento de la competencia emocional en el aula. 

Aprender. una aventura emocionante

Cuando logramos sentirnos bien en el colegio adquirimos competencias que nos ayudarán  a sentirnos bien fuera de él

 

Enlaces Bibliográficos

 

Sonia González
Sonia González