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Educación en la Amabilidad y la Seguridad desde el Principio

Educación en la Amabilidad y la Seguridad desde el  Principio

Resumen
Este artículo forma parte de un ensayo pendiente de publicación, bajo el título de “Filosofía y Pedagogía Amable”.

En las páginas que siguen a continuación se presenta un conjunto de reflexiones acerca de la inclusión de la Amabilidad y la Seguridad en la educación desde el principio. Teniendo muy en cuenta los presupuestos de la gestión de la calidad y la mejora educativa y el análisis de los vectores y las tendencias del mundo que nos toca vivir, desde las expectativas y los años que se agregan a la vida, la movilidad de las personas, el crecimiento exponencial del conocimiento, de las comunicaciones y el incremento de las interdependencias. Finalmente se desarrollan dos experiencias concretadas en unidades de aprendizaje, una al nivel de primaria y otra al de infantil y su proyección en la comunidad educativa.

Palabras Clave
Educación, Amabilidad, Seguridad, Infantil, Primaria, Calidad, Experiencia en Primaria, Experiencia en Educación Infantil.

Key Words
Education, Kindness, Safety, Early Childhood, Primary, Quality, Experience in Primary, Experience in Early Childhood Education.

Abstract
This article is part of an essay pending publication, under the title of "Friendly Philosophy and Pedagogy".

In the pages that follow, a set of reflections about the inclusion of Kindness and Safety in education from the beginning is presented. Taking into account the assumptions of quality management and educational improvement and the analysis of the vectors and trends of the world in which we live, from the expectations and the years that are added to life, the mobility of people, the exponential growth of knowledge, communications and the increase in interdependencies. Finally, two specific experiences are developed in learning units, one at the primary level and the other at the infant level and its projection in the educational community.


En nuestro anterior artículo titulado “El poder de la Amabilidad, reflexiones para una pedagogía amable a lo largo y ancho de la vida” planteábamos que “la educación es, o debería ser, un lugar seguro… pero para ello es necesario tratar de generar una cultura que asegure el respeto, la interacción entre las personas, la convivencia, la ayuda y la solidaridad entre ellas”. Este enfoque tolerante y amable es rotundamente necesario desarrollarlo desde el comienzo de la vida, desde la educación infantil, desde la educación primaria, desde el principio.

Más adelante planteábamos que “la educación no es solo un lugar seguro a lo largo y ancho de la vida, sino que además debería ser un lugar de encuentro”. Un escenario amable.

Que la educación infantil constituye una etapa educativa voluntaria, que atiende o debería atender a los niños y las niñas desde el nacimiento hasta los 6 años de edad (y aún más, a la educación de los padres, previa a la gestación y durante el embarazo y el nacimiento), es una afirmación en la que podíamos coincidir todos.

En cuanto a los periodos en los que se podría estructurar la actual división en dos ciclos, en primer lugar, de cero a tres años y el segundo de los tres a los seis años, también podría ser un lugar de común acuerdo entre los diferentes actores educativos.

"Y en cuanto a la filosofía y las orientaciones pedagógicas, también podemos convenir que hay una serie de vectores que orientan y prescriben la acción educativa, previendo objetivos y proveyendo recursos"

Como tuve ocasión de analizar y proponer en mi tesis doctoral acerca de “La evaluación de los estilos de interacción y del liderazgo del formador en el aula y su proyección en la calidad de la educación”, en la que argumentaba que la gestión de la calidad en el proceso educativo es un itinerario de mejora continua antes, durante y después de cada ciclo formativo.

En tanto en cuanto la calidad, que proviene del latín qualitas y significa: “la propiedad o propiedades inherentes de una cosa que permiten apreciarla como igual, mejor o peor que las restantes de su especie, lo que implica una especialización diferencial a través de la cual un producto o servicio se distingue de otros”, en el ámbito educativo es particularmente compleja.

Dicho de otro modo, “es un conjunto de cualidades que constituyen la manera de ser de una persona o cosa”.

La calidad de la educación infantil implica la adecuación de los productos y servicios al uso, como el ajuste de productos y servicios a los requerimientos, lo que implica, además del conocimiento de estos, el conocimiento de los alumnos, niños y niñas en este periodo, y sus exigencias. Pero también, como principio de orientación de calidad, es importante que ésta cumpla la satisfacción plena de la sociedad, que la calidad de la educación infantil responda al grado de satisfacción de todos los actores.

En este sentido, la no calidad de la Educación infantil representa un coste que la sociedad soporta desde el momento en el que no responde a las necesidades, expectativas y exigencias del tiempo que nos toca vivir.

Pero además, la calidad de la educación infantil, debería responder a la garantía de progreso y a la opción estratégica del futuro de una sociedad.

“La mejora continua de la educación infantil, primaria y del resto de etapas, es la orientación que, desde la política educativa, hasta la optimización de los recursos humanos y materiales, pasando por el diseño, programación, ejecución y evaluación del curriculum, influye en las estrategias educativas”.

Del mismo modo “parece claro que las razones para incluir los presupuestos de la gestión de calidad de la educación infantil son definitivos, en la medida en la que el curriculum formativo es perecedero, modificable, ampliable y matizable. Por ello los estándares de calidad no están en función solamente de los diseños curriculares o las macropoliticas educativas, sino en función también de la competencia, la pertenencia e implicación de los recursos humanos que trabajan en el ámbito de la educación en general, y de la educación infantil, en particular”, desde todos los actores.

La educación a lo largo y ancho de la vida, y más en concreto, la educación desde el principio, es o debería ser la suma de una serie extensa de operaciones en las que directa o indirectamente todos los actores están implicados y ahora nos atrevemos a decir, que en el tiempo que nos toca vivir, la conjunción de todas ellas es la garantía de calidad final, incorporando conceptual, didáctica y metodológicamente la amabilidad y la seguridad como pilares de la educación de los niños de cero a seis años.

Cada día más, todos los actores educativos, y particularmente los alumnos, son más exigentes, o, dicho de otra manera, menos conformistas en un universo informativo y comunicacional muy ágil, flexible, liberalizado y altamente tecnológico. Sin ir más lejos, los sistemas, procedimientos y sistemas que se generan a partir de la Inteligencia Artificial van a suponer un cambio en todos elementos, fundamentos, didácticas y evaluaciones del conocimiento y las actitudes de todos los actores educativos.

Teniendo muy en cuenta, además, los principios de igualdad, inclusión, solidaridad, convivencia que, sin duda cada día más, se conjugan en dos códigos: la amabilidad y la seguridad.

Podríamos también estar de acuerdo en que, desde el punto de vista del aprendizaje, se trataría de conocer, hacer, convivir y ser. Y nuevamente estos pilares están canalizados, o deberían de estarlo, desde la amabilidad y la seguridad.

Entre otras cosas, porque la importancia de la educación para la paz, la seguridad y la convivencia tienen una proyección en la defensa de un territorio y, además, y mucho más importante, un impacto troncal y decisivo en la vida de las personas.

En el año 2004, dentro de las semanas monográficas de la Educación de Calidad para todos, aparecían recogidas una serie de reflexiones acerca de las sorpresas inevitables en el Siglo XXI elaborado por Peter Schwartz (2003) en el que proponía que estas sorpresas inevitables “consisten en ciertas tendencias, que la gran mayoría de las personas no esperan que se produzcan y que poco a poco están poniendo en evidencia y son fundamentalmente tendencias ligadas a los avances tecnológicos y sus aplicaciones”.

Primera sorpresa: la posibilidad de un incremento consistente en la expectativa de vida de las personas. Esta primera expectativa, en el 2023, es decir, casi 20 años más tarde y azotados por la pandemia, se matiza a tenor de los fallecimientos, enfermedades y problemáticas de salud mental.

La segunda sorpresa es que se agregan años a la vida y además se agrega vida a los años. De nuevo esta afirmación sería matizable por las causas que anteriormente hemos comentado. En cualquier caso, estas dos primeras sorpresas suponen que, incluso las personas que hayan superado su jubilación laboral continúan activas con ingresos superiores a los que están en la juventud y la madurez. El impacto de estas dos sorpresas debería comportar una mejora de la calidad de vida de las personas, pero de repente una guerra, para muchos inesperada, vuelve a matizar esa mejora.

Y de aquí surgen las preguntas: ¿Esperamos a educar a los jóvenes para integrarlos en la vida activa si además las cohortes maduras y los viejos siguen trabajando y las oportunidades laborales no se amplifican? ¿Cómo vamos a construir la educación de los niños en ese contexto?

Pero todavía más. La tercera sorpresa inevitable es “el incremento y la aceleración de la movilidad de las personas”; Existen en el mundo actual más de doscientos millones de personas (estimación propia), como migrantes. Europa hoy en día y durante estos últimos 20 años que nos ocupan, habrá recibido cerca de 100 millones de inmigrantes (nuevamente estimación propia). Se mueven las personas adultas, solteras, pero también se mueven las familias y por supuesto, los niños que, provenientes de diferentes culturas tienen que educarse en los países de acogida, con las manifiestas resistencias culturales que se están produciendo.

La cuarta sorpresa inevitable es “el crecimiento exponencial del conocimiento”. En alguna ocasión he planteado que, por primera vez en la historia del conocimiento, las tecnologías van por delante de este. Los profesores, los docentes se formaron tiempo atrás sin tener en cuenta los conocimientos que el desarrollo del conocimiento biológico, psicológico, social y global comportan.

El crecimiento más que exponencial del saber supone que cada vez hay que aprender y desaprender más aspectos a lo largo de la vida. Por eso habrá que tener en cuenta en la educación infantil un diseño prospectivo para que los niños, futuros adolescentes, futuros jóvenes, futuros mujeres y hombres estén preparados para su vida.

La quinta sorpresa inevitable es “el crecimiento exponencial de las comunicaciones”. Esta sorpresa es particularmente relevante en el ámbito de la educación desde el principio, porque los sistemas, los procedimientos y las herramientas de comunicación permiten un espléndido, pero también en algunos momentos alarmante, acceso a la interacción con otros. Este disparo de las comunicaciones incluso en la etapa infantil genera actitudes y aptitudes que lamentablemente están lejos de la amabilidad, la seguridad y la convivencia, como hemos planteado al principio de este artículo.

"El crecimiento más que exponencial del saber supone que cada vez hay que aprender y desaprender más aspectos a lo largo de la vida"

La sexta sorpresa inevitable es “el incremento de las interdependencias”. Podíamos pensar que los procesos, los mecanismos de cooperación, de presión, de aislamiento, están muy lejanos de la educación infantil. Pero precisamente la dinámica de las interdependencias influye en las desigualdades en las que cada estado se manifiesta. Incluso dentro de los propios países, las diferencias económicas, medioambientales, tecnológicas dibujan escenarios de desarrollos diferenciales que nuevamente habría que contemplar en las estrategias de la educación al principio y a lo largo de toda la vida.

En conclusión, en este recorrido matizado de las ideas sobre las sorpresas inevitables (tendencias) podemos afirmar con Peter Schwartz y con Marx Scheler (autor este último de EL puesto del hombre en el Cosmos) que se ha modificado y se modificará significativamente el lugar de las personas en el mundo y por tanto el perfil educativo de calidad que estas necesitan y la vida ofrece y demanda.

Teniendo muy en cuenta los supuestos que ya hemos planteado, cualquier propuesta acerca de la educación desde el principio debería fundamentarse en la investigación y el estudio científico de la educación infantil desde los datos de las fuentes primarias y secundarias que, respondiendo a los métodos de rigor y contraste, superen el estadio de las operaciones, como apuntaba ya en mi tesis doctoral.

Como última reflexión a manera de ejemplo, presentamos dos experiencias y/o modelos de unidad de aprendizaje en la educación desde el principio.

Unidad de aprendizaje orientada a alumnos de Primaria: ¿Qué es la amabilidad?

Al finalizar esta Unidad de aprendizaje el alumno será capaz de:

  1. Relacionar el concepto de amabilidad con la interacción con sus compañeros en el aula, en su casa y en la vida cotidiana.
  2. Identificar los elementos de la amabilidad.

Niveles curriculares:
Primer nivel: diseño curricular prescriptivo (por parte de las administraciones)

Segundo nivel: diseño curricular competencia del Centro Educativo.

Tercer nivel: adecuación dentro de la futura asignatura de la Amabilidad en la Vida.

Diseño de competencias del profesor:
Con esta unidad de aprendizaje pretendemos el desarrollo integral de la persona, de sus destrezas y habilidades, de su conocimiento y aptitudes acerca de la amabilidad y por extensión, de la cultura amable.

Competencias:
Conocer los contenidos y procesos de la Amabilidad. Tomar decisiones con respecto al interés de la Amabilidad. Debatir y trabajar en equipo las cuestiones relativas a la Amabilidad.

Introducción: contextualización de la Unidad de Aprendizaje

  • ¿A quién va dirigida?
  • A 28 alumnos de primaria
  • Tres sesiones.
  • A desarrollar en el aula, patio y/o gimnasio.

Objetivos: Al finalizar la Unidad de Aprendizaje los alumnos serán capaces de:

  1. Conocer lo que es la Amabilidad
  2. Identificar la estructura de cada espacio Amable (Aula, familia, iguales…)
  3. Enumerar y describir los diferentes tiempos de la Amabilidad
  4. Delimitar los diferentes actores implicados en una interacción Amable
  5. Identificar los diferentes momentos de la amabilidad (en el aula, la familia, los juegos…)
  6. Desempeñar mediante práctica de juego de roles, la importancia de la Amabilidad

Contenidos: Conceptuales. Procedimentales. Aptitudinales.

  1. Conocimiento de la Amabilidad
  2. Estructura de los diferentes Escenarios Amables.
  3. Los diferentes tiempos de la Amabilidad
  4. Los diferentes actores implicados en cada situación Amable
  5. Los diferentes momentos de la Amabilidad
  6. Realizar prácticas sobre la amabilidad

Actividades

  • Actividades de inicio: Análisis del nivel de partida.
  • Actividades de desarrollo. Visualización de comics, juegos, apps, vr (realidad virtual). RRSS (Redes sociales).
  • Actividades de acabado: Elaboración de una check-list de contenidos y actividades realizadas.

Recursos:
Comics, Juegos, Apps, VR, Software y Hardware adecuados. Metodología activa-participativa. Personales: atención, motivación, participación.

Materiales:
Dispositivos portátiles/Pantalla multimedia.

Evaluación:
Evaluación del aprendizaje del alumno inicial: formativa, sumativa y autoevaluación del profesor y los alumnos, con los instrumentos adecuados a cada experiencia concreta. 

Una Segunda propuesta todavía más novedosa, aplicable desde los primeros estadios de la educación al principio, la podemos orientar a través del trabajo con las emociones básicas, de las que vamos a elegir Temor y Seguridad (intranquilidad).

 Introducción al Concepto de Amabilidad y Seguridad a través de las Emociones. Enfocado a alumnos de Infantil

Objetivos:

  • Reconocer la Amabilidad, el miedo y la inseguridad en imágenes.
  • Ser capaz de contar experiencias amables, temerosas y de seguridad y tranquilidad vividas.
  • Tomar conciencia del concepto de Amabilidad, del Miedo y de la Seguridad.
  • Establecer una relación de causa-efecto entre la Amabilidad y el miedo y tener el valor y la seguridad para enfrentarlo.
  • Aumentar y afianzar la Autoestima.
  • Enseñar estrategias para sentirse Amable y mejor cuando se tiene miedo y se quiere sentir seguro.
  • Involucrar a las familias en el desarrollo emocional y Amable del alumnado.

Contenidos:

  • Identificación de la expresión facial de la Amabilidad, el Miedo y la Seguridad.
  • Descripción de situaciones amables, temerosas y de seguridad vividas en primera persona. Descripción del concepto de Amabilidad, Miedo y Seguridad según sus experiencias.
  • Establecimiento de una relación causal entre la Amabilidad, el Miedo y el Valor y la Seguridad para enfrentarlo.
  • Conocimiento de estrategias para sobrellevar los momentos de miedo y afianzar los de amabilidad y seguridad.

Evaluación:

  • Reconoce la amabilidad y las emociones del miedo y la seguridad en imágenes. Cuenta alguna experiencia amable, temerosa y de seguridad vivida.
  • Toma conciencia del concepto de Amabilidad, Miedo y Seguridad.
  • Establece una relación de causa-efecto entre la Amabilidad, el Miedo, la Falta de Valor y la Seguridad.
  • Reconoce y comprende la Amabilidad y las emociones propias y ajenas, poniéndose en el lugar del otro.
  • Conoce y aplica estrategias para sentirse mejor cuando supera sus miedos, es amable y se siente seguro.

Actividades:

  • Observamos fotos de personas amables, de otros que muestran miedo e inseguridad, preguntándonos qué tienen en común y cuáles son las diferencias.
  • Prestamos atención a las imágenes que tienen por objeto la amabilidad, el miedo y/o la inseguridad.
  • Tomamos nota de las cosas que les ponen miedosos o inseguros y/o amables.
  • Solicitamos la colaboración de las familias aportando fotos, o noticias que hayan provocado inseguridad o demuestren amabilidad.
  • Proponemos nuevas estrategias de amabilidad y seguridad para superar los momentos de miedo.

Recursos:

  • Imágenes de amabilidad, miedo y/o inseguridad, tanto de niños como de adultos.
  • Fotos de personas que reciben la ayuda o amabilidad de alguien para superar esos momentos de miedo o inseguridad.
  • Cuentos en los que se habla específicamente de la amabilidad, del miedo, de la inseguridad y/o seguridad (Cuentos tradicionales).
  • Textos en los que se hace mención a la Amabilidad y a las formas de superar el miedo y la inseguridad.
  • Libro de la clase en el que se aglutinan las respuestas aportadas por las familias sobre las cosas que les dan miedo a sus hijos y las fotos que responden a momentos de inseguridad, pero también de seguridad y amabilidad.

Conclusión

No quiero finalizar este ensayo sin hacer referencia a la experiencia que he tenido recientemente en un Centro de Educación Especial. Nada más entrar por la puerta, junto a murales con expresiones, grafismos y pinturas con mucho colorido, me llamaron la atención las frases que aparecen en los frentes de los escalones de acceso: disfrutamos de la lectura, elegimos ser amables, te ayudamos a ser feliz y respetamos tu espacio, cada una en un escalón con diferentes colores, de abajo a arriba. Una muestra de la incorporación de la amabilidad y el espíritu de la seguridad en las comunidades educativas.


Para cualquier información sobre este documento pueden dirigirse a igclever@gmail.com

N.B. Para ampliar los datos puede consultarse la tesis doctoral del autor (https://dialnet.unirioja.es/servlet/tesis?codigo=269720, ).

Ignacio García Palomero.
Doctor en Filosofía y en Ciencias de la Educación.
Comunidad de Madrid.

Ignacio García Palomero.
Doctor en Filosofía y en Ciencias de la Educación.
Comunidad de Madrid.