VISITA A LA RESIDENCIA DE ESTUDIANTES

El 5 y 6 de mayo los grupos de Nivel II del CEPA Los Rosales salimos hacia la Residencia de Estudiantes.

Allí fuimos conducidos hacia los edificios gemelos donde estaba el saloncito principal en el que se dieron cita escritores reconocidos como García Lorca, junto con sus amigos, el cineasta Luis Buñuel y el pintor Salvador Dalí.

Nuestros guías nos contaron la historia de este pintoresco lugar: su construcción con la intención de albergar a estudiantes y sabios de todas las nacionalidades que acudían a las conferencias y actividades que allí se ofrecían. Allí estuvieron científicos tan importantes como Madame Curie y Albert Einstein. De nuestros siete premios Nobel, cinco de ellos estuvieron relacionados con la Residencia. Y entre las mujeres, allí estuvo la pintora Maruja Mallo, y abogada y política, Victoria Kent.

La Residencia tuvo otras sedes, como la que se encontraba en la calle Martínez Campos o en la calle Fortuny. Fueron instituciones como la ILE y la Junta de Ampliación de Estudios las encargadas de desarrollar este importante proyecto que con la guerra, quedaría truncado. 

Ilustres hombres de la época contribuyeron a su creación como el arquitecto Torres Quevedo, el escritor Echegaray, que sería premio Nobel y también el duque de Alba. La Residencia se empezó a construir en los altos del antiguo hipódromo, lugar se le denominaría "La colina de los chopos", como así la nombraba el poeta Juan Ramón Jiménez, aunque no era terreno propicio para los chopos, que necesitan gran cantidad de agua. 

Allí no se impartían conocimientos, pero se construyó un laboratorio. No había tampoco becarios, sino que era un lugar que solo se podían pagar algunos estudiantes acomodados. En la actualidad, se ofrecen sus dependencias para albergar a estudiantes o personalidades destacadas dentro de la cultura. 

Grupo de alunos de nivel II 02

Grupo de alumnos de Nivel II 03

La Residencia de Estudiantes de Madrid es un centro fundado en 1910 por la Junta para la Ampliación de Estudios producto directo de las ideas renovadoras que había iniciado en España el krausista, Francisco Giner de los Ríos con la fundación en 1876 de la Institución Libre de Enseñanza.

En la residencia estuvieron Alfonso Reyes Ochoa, Julián Besteiro, Santiago Ramón y Cajal, Manuel de Falla, Unamuno, Eugenio d'Ors, Federico de Onís, Valle-Inclán, Manuel Machado, León Felipe, Zulueta, Federico García Lorca entre otros. El motivo de su visita  fue para formarse mejor en varios ámbitos de estudio.

Con la instauración de la dictadura de Francisco Franco, buena parte de sus residentes y profesores se vieron forzados a exiliarse al extranjero o a ser silenciados en un exilio interior.  A partir de 1939 se clausuró la Junta para la ampliación de Estudios y la mayoría de las instituciones de “La colina de los chopos” pasa a depender del Consejo Superior de Investigaciones Científicas,CSIC. Hoy en día la Residencia de Estudiantes ha sido distinguida con el sello de Patrimonio Europeo concedido por la Unión Europea debido al papel que ha desempeñado en la historia y la cultura de Europa.

Adrián Partida Solís, Nivel II 03

YINCANA POR EL BARRIO DE LAS LETRAS

Los días 20 y 21 de marzo hicimos una salida por el Barrio de las Letras para que los alumnos de nivel II hicieran la tradicional Yincana con motivo del Día del Libro

Estas son algunas de las impresiones que nos dejaron de su recorrido.

El día 21 de abril del 2022, por la cercanía del Día del Libro, cambiamos la rutina de las clases por una gymkana en el Barrio de las Letras.

Pensábamos que sería una actividad aburrida en una zona de Madrid por la que hemos pasado un millón de veces, pero se convirtió en una grata y muy divertida experiencia, y esto, cambió nuestra perspectiva del barrio. Ahora sabemos por qué se le llama:

¡¡¡¡¡¡ EL BARRIO DE LAS LETRAS!!!!!!

Ese día en la zona había muchos colegios haciendo actividades parecidas a la nuestra. Los vecinos de la zona deben de estar muy acostumbrados a ese jaleo, porque casi sin preguntar, nos decían dónde teníamos que ir o qué buscar y se prestaban a colaborar.

La actividad consistía en 19 pruebas, por todo el barrio, buscando pistas sobre escritores que vivieron o se relacionaron allí.

Empezamos en el Callejón del Gato con los espejos deformantes de Valle Inclán. Pasamos por la calle Cruz esquina con calle Espoz y mina; la Iglesia de San Sebastián, que para nuestra sorpresa descubrimos que en su interior está la tumba de Lope de Vega; calle Huertas, donde realizamos varias pruebas; calle Príncipe, frente al palacio de Santoña; pasamos por la taberna del León de Oro, donde aparecen varios escritores en los azulejos de la fachada (Calderón de la Barca, Lope de Vega…); seguimos el recorrido por las calles Cervantes, Quevedo y Lope de Vega. En la calle del Prado, llegamos al Ateneo. En su fachada se pueden ver los relieves de Velázquez, Alfonso X y Cervantes. Terminamos nuestra gymkana en la plaza de Santa Ana, realizando varias pruebas.

Nuestro grupo finalizó el recorrido antes de la hora  y resultamos ser las ganadoras. Un día especial y divertido que volveríamos a repetir.

 

PRUEBA DE ESPEJOS (Nº6)

El pasado día 21 de abril nos reunimos los alumnos del Cepa Los Rosales para hacer una Gymkana en el Barrio de las Letras donde vivieron y escribieron algunos de los escritores del famoso Siglo de Oro y de la Literatura Universal.

Comenzamos todos reunidos en la plaza de Santa Ana donde nos agrupamos por equipos. Los profesores nos dieron a cada uno de los equipos el itinerario y las pruebas que había que realizar. Leímos un poco las pruebas y nos pusimos manos a la obra.

La primera prueba parecía no muy difícil pero claro, la plaza es bastante grande como para verlo a simple vista. No se nos resistió y al final la encontramos. Debíamos de encontrar en un balcón un título de una obra de Galdós.   Las siguientes fueron similares aunque en más de una de ellas teníamos que interactuar con los vecinos del barrio o los transeúntes preguntándoles por libros o sitios relevantes en el barrio como la tumba de Lope de Vega o inscripciones las cuales estaban situadas en las mismas aceras sobre frases de libros, como por ejemplo, un frases muy conocida que dice así: En un lugar de la mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua y rocín flaco” .

Imagino que todos sabréis quién es. Lo más curioso es que en una de la pruebas tuvimos que pedirle a algún transeúnte de la zona que nos leyera esta frase escrita en el suelo y preguntarle si alguna vez en su vida había leído el Quijote. Un señor nos contestó que lo había leído siete veces. “¡INCREÍBLE!” Y la parte que más le gustó fue la segunda.

 

Así continuamos realizando las demás pruebas restantes hasta que llegamos otra vez al punto final de la Gymkana. Fuimos los segundos más rápidos de todos los equipos del CEPA.

 La verdad que fue un día muy divertido donde aprendimos muchas cosas de nuestra historia y la literatura.  Descubrimos sitios en nuestra ciudad que no conocíamos. Una experiencia muy recomendable y entretenida.

Juan Carlos Rojas, Nivel II 03

 El pasado día 21 de abril nos reunimos los alumnos del Cepa Los Rosales para hacer una Gymkana en el Barrio de las Letras donde vivieron y escribieron algunos de los escritores del famoso Siglo de Oro y de la Literatura Universal.

Comenzamos todos reunidos en la plaza de Santa Ana donde nos agrupamos por equipos. Los profesores nos dieron a cada uno de los equipos el itinerario y las pruebas que había que realizar. Leímos un poco las pruebas y nos pusimos manos a la obra.

La primera prueba parecía no muy difícil pero claro, la plaza es bastante grande como para verlo a simple vista. No se nos resistió y al final la encontramos. Debíamos de encontrar en un balcón un título de una obra de Galdós.   Las siguientes fueron similares aunque en más de una de ellas teníamos que interactuar con los vecinos del barrio o los transeúntes preguntándoles por libros o sitios relevantes en el barrio como la tumba de Lope de Vega o inscripciones las cuales estaban situadas en las mismas aceras sobre frases de libros, como por ejemplo, un frases muy conocida que dice así: En un lugar de la mancha de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua y rocín flaco” .

Imagino que todos sabréis quién es. Lo más curioso es que en una de la pruebas tuvimos que pedirle a algún transeúnte de la zona que nos leyera esta frase escrita en el suelo y preguntarle si alguna vez en su vida había leído el Quijote. Un señor nos contestó que lo había leído siete veces. “¡INCREIBLE!” Y la parte que más le gustó fue la segunda.

 Así continuamos realizando las demás pruebas restantes hasta que llegamos otra vez al punto final de la Gynkana. Fuimos los segundos más rápidos de todos los equipos del CEPA.

 La verdad que fue un día muy divertido donde aprendimos muchas cosas de nuestra historia y la literatura.  Descubrimos sitios en nuestra ciudad que no conocíamos. Una experiencia muy recomendable y entretenida.

Juan Carlos Rojas, Nivel II 01

UN OLMO CENTENARIO EN EL BARRIO DE LOS ROSALES

Con motivo de la visita que nuestros alumnos realizaron al Parque del Manzanares para conocer la historia de este magnífico árbol, testigo de tantas vivencias y acontecimientos en el barrio, hemos querido seguir los pasos de otro famoso olmo, el de Machado, para inspirarnos en estos nobles árboles y recordar nuestras propias vivencias y sentimientos.

A un olmo seco

Al olmo viejo, hendido por el rayo
y en su mitad podrido,
con las lluvias de abril y el sol de mayo
algunas hojas verdes le han salido.

¡El olmo centenario en la colina
que lame el Duero! Un musgo amarillento
le mancha la corteza blanquecina
al tronco carcomido y polvoriento.

No será, cual los álamos cantores
que guardan el camino y la ribera,
habitado de pardos ruiseñores.

Ejército de hormigas en hilera
va trepando por él, y en sus entrañas
urden sus telas grises las arañas.

Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta;
antes que rojo en el hogar, mañana,
ardas en alguna mísera caseta,
al borde de un camino;
antes que te descuaje un torbellino
y tronche el soplo de las sierras blancas;
antes que el río hasta la mar te empuje
por valles y barrancas,
olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.

Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.

Antonio Machado, (tomado de https://www.antoniomachadoensoria.com/olmo.htm)

Imagen: olmo seco en la ciudad de Soria

El poema ” a un olmo seco”, creado por Antonio Machado, en la primavera de 1912 en Soria, es un viaje a la esperanza, para la recuperación de su mujer Leonor, con quien pasea cada día en busca del aire puro soriano. Tres meses después la joven esposa hará su último viaje, y el poeta cambiará de destino para siempre.

El resultado es un compendio de historias, poemas, que cada uno ha tamizado con un color otoñal diferente, el de su propia vida y los resultado han sido bien curiosos.

EL OLMO ABUELO

El olmo más antiguo de este lugar 
su razón de venir hasta aquí
fue a través de las aves migratorias
que a su paso dejaban caer 
una semilla de su especie.
Empezó a crecer hasta llegar
a tener un enorme grosor.
Sus raíces y se alimentaban
de las aguas del río.
En otoño sus hojas
eran de color amarillo
y en la primavera
se vestían de verde.
Es muy generoso:
ofrece su amplia sombra
a todos los visitantes,
excursionistas y paseantes
que recorren esta zona. 
Y algunas aves descansan
en sus frondosas ramas.

Sicta Lapay Severino, Nivel I - 01

EL OLMO DE MI CORAZÓN

En el olmo de mi corazón
permanece nuestro amor
sin dañarse la corteza
que fortalece poco a poco
al olmo del amor.
Juntos los dos
sin que dañen al olmo
de nuestro primer amor.
Se acabó el otoño 
y sigue sin morirse el olmo
con su corteza y sus ramas,
permanecemos juntos,
como en aquella mañana.
¡Oh, olmo de mi corazón! 
¡Nunca mueras, por favor!
Sigue con tu fuerza, sin dañar
nuestros lazos de pasión.
Me llenas con tu olor y color.
Juntos compartimos,
nuestro recuerdo de amor.

Yecica Arenas Mazo

AL OLMO

Denise, una alumna de Nivel I-01 ha indagado la historia de otros olmos centenarios y ha encontrado este poema al olmo de la Villa de Ves.

Olmo de la vida,
olmo del Villar,
¡cuántos corros has tenido
de la gente del Villar!

Olmo, debajo de ti
he sentido el frescor
de tu espesa sombra y,
en los días bochornosos,
echando la siesta.

Olmo querido,
centenario y majestuoso
de esta villa;
¡cuánto saber acumulado
durante tu vida!

Olmo de la vida,
si supieses escribir
¡cuántas cosas nos escribirías
de la gente de esta villa!

Recogido por Denise Cruz , Nivel I - 01 en el blog de Vicente Jiménez García, Olmo de Villa de Ves: http://olmodevilladeves.blogspot.com/2011/04/poema-del-olmo-del-villar.html

TESTIMONIOS DE LA VISITA

El viernes 19 de noviembre los alumnos del CEPA Los Rosales hicieron una excursión al río Manzanares a su paso por el barrio de Los Rosales

Llegamos al CEPA y nos reunimos los alumnos de Nivel I de los grupos 01 y 03.

Un biólogo llamado Raúl,  vestido al estilo Tadeo Jones, con gafas, prismáticos, barba blanca que no le cabía en la mascarilla, parecido a Moisés, con una varita en la mano y una mochila tipo ordenador, nos guiaba y nos fue explicando la historia del olmo.

 

También había periodistas de Telemadrid, que entrevistaron al experto y a una compañera bióloga. 

El árbol tenía más de doscientos años: Tenía muy mal aspecto ese árbol. ¿Quién sabe qué historias habría sufrido bajo sus ramas? 

Javier Ernesto LLano Castro, nivel I-03

* * * * 

Esa mañana soleada y fría nos estaba esperando Raúl el biólogo-profesor que nos acompañaría y explicaría todo acerca del olmo centenario.

Llegamos al lugar por fin, porque ¡menuda odisea hasta llegar al árbol! Allí también estaban las cámaras de TV con su periodista micrófono en mano, llamado Masegosa, que se dirigió a una compañera para preguntarle y salió escopetada del lugar, así es que preguntó a otra que qué le parecía el árbol. Sofía le contestó que era un hermoso árbol con un pedazo de tronco inmenso y unas ramas enormes.

Raúl contó que quedaban cinco árboles en España de esta edad y esperaba que perduraran miles y miles de años más.

Isabel Olvera Gil; Nivel I - 03

EL OLMO

En la ribera de un río con un paisaje maravilloso había diferentes tipos de seres vivos: animales, insectos y árboles y cada uno añadía una belleza especial al río.

En un lado de la orilla del río había una tierra de un viejo agricultor que tenía un árbol muy especial: un olmo tan gigante que con sus ramas tan altas y tan grandes parecía que estaban abrazando el cielo. Su tronco muy ancho y sus grietas contaban historias de hacía muchos años. 

 Muchos hechos habían pasado alrededor de él hasta que un día llegó un invitado indeseable: un escarabajo que era la razón de ponerse este árbol enfermo. Había perdido las hojas y las ramas se habían vuelto muy secas. El viejo  se puso tan triste y preocupado por su querido árbol que empezaron a buscar soluciones inmediatas para salvar el árbol y por casualidad un biólogo  al que le interesaban los árboles notó qué problema tenía el olmo y ofreció su ayuda al viejo desesperado.  El biólogo descubrió el escarabajo que  afectaba y dañaba al pobre árbol y ya supo que podía salvar al árbol.

-Hay que poner un producto para salvar al árbol de los hongos y los huevos del escarabajo. -dijo el biólogo al viejo agricultor. El viejo respondió;

-¿Está seguro de que no va a pasar nada malo al árbol?

-Sí, claro que sí.  -respondió. 

Así fue. El biólogo puso el producto y al poco tiempo el árbol recuperó su vida y su belleza y el viejo se puso contento y orgulloso de su árbol especial.

Siham Charkaoui

EL MISTERIO DEL CRÁNEO EN EL OLMO

Érase una vez el año 1943 en un barrio de la ciudad de Madrid, de España (Villaverde Bajo).

Un día salieron los niños del barrio al parque para buscar nidos de pájaros. Pasaron de un árbol a otro buscando hasta llegar a un olmo muy viejo. Vieron algo redondo que parecía un huevo y se acercaron para ver qué era pero lo que parecía un huevo resultó ser un cráneo atrapado entre las ramas de un olmo.

Los niños se fueron corriendo a sus casas muy asustados y contaron lo que vieron a sus padres. La policía acudió al lugar donde estaba el olmo para averiguar lo que habían comentado los niños. Al llegar, encontraron un cráneo y el esqueleto de una persona. La policía empezó a buscar entre las denuncias de personas desaparecidas para saber de quién podía ser el cadáver y no llegaron a ninguna conclusión.

Pasaron muchos años y nadie sabía de quién era, hasta que una mañana unos vecinos del barrio vieron, en una piedra grande, algo escrito. Al mirarlo vieron escrito: "¿Quién ha mató y puso a Bella en el olmo?"  La policía empezó a buscar a las mujeres que tenían este nombre porque sospechaban de alguien que conocía a la víctima o al mismo asesino. Buscaron muchos años más sin llegar a ningún resultado.

Hasta hoy el crimen está sin resolver pero quién visita el barrio de Villaverde Bajo en Madrid, aún puede encontrar la pregunta grabada en una piedra esperando que alguien responda quién mató y puso a Bella en el olmo.

Charifa El Yamlahi