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Visor

CEIP Luis Vives. Percepciones sobre el aprendizaje cooperativo desde la mirada del alumno

Revista Digital Educamadrid

Fecha de publicación 01 de febrero de 2016

Resumen

El presente artículo muestra los resultados obtenidos tras la implementación del aprendizaje cooperativo en el CEIP Luis Vives de Alcalá de Henares (Madrid), enmarcado dentro de un Proyecto de Innovación Educativa sobre la utilización de dispositivos digitales a través de esta metodología de aprendizaje. El objetivo del presente estudio ha sido analizar las concepciones del profesorado en torno al aprendizaje cooperativo y evaluar esta metodología a partir de las percepciones subjetivas del alumnado desde un punto de vista fenomenológico.

Proyectos de innovación TIC

2015

Autores

Esther Rivas Rivero, Amador Santiago Gómez y Eva Isabel Tejeda Alcolea

CEIP Luis Vives (Alcalá de Henares)

Escudo del centro

1.INTRODUCCIÓN

1.1.Contexto: justificación, cómo nace la idea.

Cuando presentamos este proyecto según convocatoria de la Orden 1706/2014 de 22 de mayo de la Comunidad de Madrid, pretendíamos dar un salto cualitativo en la organización pedagógica de nuestro centro sobre todo, en la implantación de nuevas estrategias metodológicas que se adaptaran a los nuevas realidades sociales y escolares, que tan rápidamente se están produciendo y tanto están cambiando a nuestros alumnos, sus necesidades, motivaciones e intereses.

La nueva Ley Educativa 8/2013 modifica tres de los objetivos generales de la etapa de Primaria de la anterior Ley. Uno de ellos, el segundo en concreto, dice literalmente que se han de “desarrollar hábitos de trabajo individual y de equipo, de esfuerzo y responsabilidad en el estudio así como actitudes de confianza en uno mismo, sentido crítico, iniciativa personal, curiosidad, interés y creatividad en el aprendizaje y espíritu emprendedor.”

Además año tras año se nos han planteado otras dificultades en el quehacer docente diario, todas ellas bastante comunes en el resto de colegios: falta de atención y de motivación de los alumnos hacia el aprendizaje, dificultades para la resolución de problemas matemáticos y dificultades para la realización de tareas en las que el razonamiento es una destreza necesaria. A todo ello hay que sumar nuestra condición de centro de integración preferente de alumnos con discapacidad motórica y la necesidad de darles una respuesta.

Los profesionales que trabajamos en el CEIP Luis Vives, tras numerosas incursiones teórico-prácticas a través de la formación continua, surgen evidencias de la necesidad de un cambio en nuestro colegio. Por otra parte, dichos cambios se venían produciendo en la sociedad: TIC, globalización, cambios en la organización del trabajo, acceso a la información…por lo que la transformación metodológica también debía producirse.

Ya sólo faltaba decantarse por una propuesta metodológica y determinar el papel que se les quiere dar a esas nuevas tecnologías en el proceso de enseñanza aprendizaje: las TIC han de ser una herramienta invisible, y fundamental, al servicio de ese proceso. El papel de los alumnos en el proceso ha de pasar a ser activo en la fabricación de sus propios aprendizajes: el aprendizaje cooperativo.

Concluimos este punto con las palabras de un contemporáneo experto en educación, Richard Gerver, “lo bueno de la educación está en la experiencia, en la alegría de descubrir algo, en la necesidad de tener una pregunta y poder darle una respuesta”.

1. 2. Objetivos propuestos en nuestro proyecto.

  1. Incluir las tecnologías de la información y la comunicación como una herramienta invisible al servicio del proceso de enseñanza – aprendizaje de los docentes.
  2. Hacer de las tecnologías de la información y la comunicación una herramienta más con la que los alumnos puedan elaborar sus propios aprendizajes: “recojo información, la clasifico, analizo y filtro. Elaboro mis propios aprendizajes plasmándolos en un proyecto final que comunico al resto de mis compañeros”.
  3. Dotar al centro de los medios y equipamiento necesario para la consecución de los objetivos anteriormente descritos.
  4. Utilizar las TIC como herramientas compensadoras de desigualdades (brecha digital).
  5. Educar en el correcto uso de las TIC, mostrando los peligros que también conllevan.
  6. En el ámbito de los alumnos con necesidades educativas especiales, adiestrarles también en el uso de dispositivos electrónicos y en el trabajo en equipo, con un triple objetivo: escolar, personal y de futuro profesional.
  7. Cambiar la metodología del centro hacia una nueva en el que el papel del docente es de acompañar y guiar a los alumnos hacia la construcción de su propio aprendizaje.
  8. Incluir paulatinamente en la práctica docente diaria la metodología cooperativa como una estrategia organizativa dentro del aula.

1. 3. Fundamentación teórica.

Según Kagan (1994, p. 65) “el aprendizaje cooperativo se refiere a una serie de estrategias instruccionales que incluyen la interacción cooperativa del estudiante sobre algún tema, como una parte integral del proceso de enseñanza aprendizaje”. El mismo autor establece cuatro principios básicos en esta metodología (Pliego, 2011):

  • interdependencia positiva,
  • responsabilidad individual,
  • participación igualitaria,
  • interacción simultanea

Para Ferreiro (2003) este aprendizaje también se llama aprendizaje entre iguales o colegas y parte de la idea de que los niños aprenden mejor si se enseñan entre ellos. Este tipo de aprendizaje es una alternativa educativa importante a considerar para el desarrollo, entre otras cosas, de la creatividad (Ferreiro, 2012). Añón y Roig (2009) afirman que esta metodología se basa en el trabajo en pequeños grupos heterogéneos en los cuales todos los alumnos trabajan entre sí para lograr un mayor aprendizaje, pero siempre teniendo en cuenta que todos los integrantes del grupo han de alcanzar el conocimiento.

2. DESARROLLO

2. 1. Resultados de la experiencia.

Los participantes fueron 25 docentes del centro, con una antigüedad en el cuerpo de maestros de 21,32 años de media (DT=10,4334) y una antigüedad en el centro de 14,16 años de media (DT=8,9381). Previamente a la realización de la formación sobre aprendizaje cooperativo se les preguntó sobre qué recursos pedagógicos utilizan en las aulas (Tabla 1).

 Tabla 1

Tabla 1. Recursos empleados por los docentes.

 

Como se desprende de la Tabla 1, la totalidad del profesorado utiliza fichas de elaboración propia como herramienta en el proceso de enseñanza y aprendizaje. Los libros de textos son empleados por el 80% de los profesores. El aula de informática y el material manipulable son usados por el 96% de los participantes.

Por otra parte, se analizaron las percepciones del profesorado en torno al aprendizaje cooperativo. La Tabla 2 refleja las respuestas de los participantes en torno a determinadas creencias sobre esta metodología.

Tabla2Tabla 2. Creencias sobre el aprendizaje cooperativo (A.C.)

 

Como se observa en la Tabla 2, se aprecia un elevado porcentaje de contestaciones “no sabe no contesta” por parte de los profesores. El 64% de los participantes estaban de acuerdo respecto a que el aprendizaje cooperativo facilita la atención a la diversidad y cerca del 50% de los participantes afirmó no estar de acuerdo respecto a que “el aprendizaje cooperativo no vale para los alumnos con necesidades educativas especiales”. Más del 70% estaba de acuerdo con  el ítem “el aprendizaje cooperativo incrementa la motivación” y el ítem “el aprendizaje cooperativo mejora la capacidad para el trabajo en equipo”. Partiendo de las creencias en las que se obtuvo mayor porcentaje de acuerdo (mejora la motivación y la capacidad de trabajo en equipo), tras la implementación del aprendizaje cooperativo en las aulas, se realizó una evaluación del proyecto a partir de la experiencia vivida por el alumnado. Se seleccionó una muestra de alumnos de 6º de Educación Primaria por tener una mayor conciencia de los procesos de aprendizaje y por cuestiones vinculadas con el desarrollo evolutivo que les hace tener mejor conciencia de la metacognición. El tipo de muestreo fue aleatorio simple, seleccionando el mismo número de alumnos para los dos grupos que componen el nivel. Para la realización de las entrevistas se utilizó una grabadora, por lo tanto, la trascripción de las entrevistas es literal. Los entrevistados fueron divididos en función de la procedencia de su aula (A/B) y fueron numerados del 1 al 11 como se muestra en la Tabla 3:

 Tabla 3Tabla 3. Participantes

 

El diseño de este estudio es fenomenológico de carácter ideográfico. “La fenomenología es la investigación sistemática de la subjetividad cuya meta es el estudio del mundo tal y como se nos presenta a través de la conciencia” (Bullington y Karlson, 1984, p. 51, en Bernardo y Calderero, 2007). Se centra en cómo las personas comprenden los significados de lo que sucede, por ello el tipo de investigación utilizada en la fenomenología de este trabajo es la metodología cualitativa; ya que ésta describe las cualidades de un determinado fenómeno (Mendoza, 2006), estudiando en profundidad una situación concreta y buscando su comprensión (Bernardo y Calderero, 2007).

En primer lugar, ante la pregunta “¿Qué opinas del aprendizaje cooperativo?” los alumnos hicieron referencia a cómo potencia el aprendizaje y lo que esta metodología ha supuesto para ellos. Algunas de sus respuestas fueron las siguientes:

A7: “Pues me parece una táctica bastante buena para mejorar el aprendizaje”. B3: “Que es mejor trabajar juntos que tú solo, porque así los demás aportan ideas y tú aportas las tuyas y luego las entiendes mejor”. A5: “Que todos juntos podemos crear más ideas y la mejor pues saldrá entre todos”. A su vez los alumnos B7, A9, B9, A2, B4 y B5 contestaron “Pues que es una manera muy útil y fácil de aprender y se aprende más”. De los 22 alumnos que han compuesto la muestra, algo más de la mitad destacó la influencia que éste tiene sobre su propio aprendizaje (54,5%).

Otros alumnos hicieron referencia al crecimiento personal en sus respuestas, por ejemplo:

A6: “Pues que ayuda bastante la verdad, ya que la ayuda que recibes la recibes no sólo de parte de tus compañeros, sino también te ayudas a ti mismo, ya que al tener que apoyar a tus compañeros, sin querer, también te ayudas verbalizando las cosas y explicando”. A2: “Te hace lograr metas que trabajando solo no se pueden conseguir, como por ejemplo, al hacer una tarea tú solo te puedes equivocar en algo pero si la haces en grupo con tus amigos se hace mejor”. B6 y A10 contestaron “nos ha ayudado a ser más autónomos y responsables”. El 31,82% del total de la muestra destacó el crecimiento personal que le había aportado esta metodología.

Por otra parte, los alumnos hicieron alusión a las relaciones sociales:

B6: “Es bastante efectivo. Me gusta sí, porque…, por ejemplo, yo antes no me hablaba mucho con “X” (nombre de una alumna) y ahora que me han puesto en el grupo con ella pues me voy hablando más. Me ha dado la posibilidad de conocer más a mis compañeros”. B7: “Sólo aprendes de tu profesor mientras que de forma cooperativa aprendes cosas, por ejemplo, nos explican una cosa y tú no lo has entendido y te da como cosa preguntar, pues entonces un compañero tuyo te lo puede explicar y sabes muchas cosas más, a lo mejor un compañero sabe más cosas de un tema que ha desarrollado la profesora y te explica otras cosas, es decir, además te ayudan y complementan tu aprendizaje”. A10: “Nos ha ayudado a estar más unidos”. B11: “Pues que es muy bueno para nosotros porque conocemos al compañero que tenemos de hombro y de frente, y sabemos más o menos cómo van trabajando los demás, vamos aprendiendo a ir al ritmo de los demás, no ir solos e ir siempre al mismo ritmo, sino que según con el compañero que estés darle tiempo, acompañarle, para explicar las cosas y luego a él, y reforzarte a ti”. B1: “Me encanta, pues opino que es mejor el aprendizaje cooperativo porque estás con tus amigos, haces los deberes juntos, alguna duda que tienes la puedes preguntar porque para eso estamos los amigos, para ayudar, y siempre se nos ocurre una idea cuando estamos hablando o cuando estamos haciendo los deberes. La mitad de los alumnos entrevistados incluyeron las relaciones sociales en su respuesta.

Exponiendo ideas en equipo

Exponiendo ideas en equipo

Con la pregunta “¿cómo te ha ayudado el aprendizaje cooperativo?”, los alumnos proporcionaron respuestas relacionadas con la mejora del aprendizaje:

B7: “En la forma de estudiar, cómo se me quedan las cosas en la cabeza”. B9: “Antes yo sabía hacer algunas cosas de una manera y ahora sé hacerlas de tres”. Mientras que los alumnos A9, B10, B11 y B1 contestaron “me ha ayudado a aprender y a estudiar”. Seis alumnos hacen alusión a una mejora del aprendizaje a partir del uso del aprendizaje cooperativo en el aula (27,3%).

Además, los alumnos hicieron alusión al crecimiento personal:

A1: “A tener más confianza”. B2: “Pues un montón, a ser atenta, a fijarme más en el proceso de hacer las cosas”. A6: “me ha ayudado muchísimo a no olvidarme de cosas, los deberes, por ejemplo; la responsabilidad, ya que te da muchísima y te ayuda generalmente a darte cuenta de las cosas y la ayuda que te pueden brindar tus compañeros, pues es bastante mayor de la que puedes conseguir en un aprendizaje individual”. A7: “Yo creo que ahora mismo tengo más autonomía, recuerdo mejor los deberes, tengo más responsabilidad”. A10: “Me ha ayudado porque antes no me gustaba estudiar y ahora me gusta más. Antes me daba mucha pereza hacer los deberes y ahora ya me encanta”. B10: “A hacer la tarea más rápido”. B11: “Ahora con el cooperativo, además de ir a un ritmo diferente, cuando llegas a casa te encuentras animado de decir… voy a hacer los deberes para aportar al grupo, tener nuevos resultados para luego ver en clase y compararlo con todos los demás del grupo”. La mitad de los alumnos, recalcan o hacen alusión al crecimiento personal que se da a través de este aprendizaje.

Finalmente, los alumnos proporcionaron respuestas vinculadas con el aspecto social, las habilidades sociales y su relación con el grupo de iguales:

A6: “Me ha ayudado, evidentemente…, bastante a la hora de tratar con compañeros y también a juntar lazos”. A7: “Conozco mejor a compañeros con los que antes pues apenas hablaba”. A1: “A saber respetar más a mis compañeros, porque a lo mejor antes no respetaba mucho a los compañeros, bueno, no es que no los respetase, es que a lo mejor no tenía tanta confianza como ahora”. B1: “Porque antes como no entendía algunas cosas, bueno, tampoco preguntaba mucho, pero ahora pregunto y alguna cosa que tenga mal o que no la haya escuchado muy bien pues me la dicen mis compañeros, y algunas veces también me piden ellos que les ayude. Se me da bien ayudarles, a mí me gusta”. Un total de siete alumnos incluyen o hacen referencia a la mejora de las relaciones sociales en sus respuestas, representando el 31,8%.

A la pregunta “¿Cómo te ha ayudado el aprendizaje cooperativo con tus compañeros?”, los alumnos respondieron:

A1: “Pues no sé, mis opiniones de algunos de ellos han cambiado para bien. Bastantes. Ha hecho que me lleve mejor con muchos compañeros como por ejemplo con “X” (nombre del alumno). Antes no me caía bien y ahora, como le tengo en el grupo, ya me cae mejor”. B2: “Pues que los he conocido mejor y hay mucho mas compañerismo y confianza”. A7: “Pues yo creo que los conozco más, con compañeros que apenas me reconocía como amigos hemos hecho un vínculo de amistad. A10: “Me llevo mejor con la gente”. A11: “He forjado más amistad con ellos porque se comparten más cosas”. B11: “A conocerles mejor, ahora les conozco muchísimo más, les conozco a la hora de estudiar, a la hora de hacer los deberes, sus gustos, porque se habla, y yo creo que a lo largo de este año hemos ido conociéndonos aún más que antes. Con el aprendizaje cooperativo pues es como reforzarte a la hora de saber cómo son los compañeros”. Un total de diez alumnos (45,45%) hicieron alusión a cómo este aprendizaje había influido positivamente en las relaciones sociales entre iguales.

Tabletas como acceso al currículum

Tabletas como acceso al currículo

En segundo lugar, se hizo referencia al crecimiento personal:

B7: “Bueno desde que hemos empezado con el aprendizaje cooperativo se me ha quitado mucho la vergüenza”. A10: “Me relaciono más”. B1: “Pues me ha ayudado a quitarme la vergüenza. También me han ayudado a hablar así, fluido, y a entenderme con los compañeros bastante”. A2: “Haciéndome cada día un poco más capaz, yo antes no tenía tantas esperanzas en mí pero al trabajar en grupo he mejorado la responsabilidad poniendo mis metas propias”. Cuatro alumnos (18,2%) destacaron la ayuda producida por el aprendizaje significativo en el crecimiento personal.

En tercer lugar, hicieron referencia al aprendizaje:

B1: “Antes los deberes que no me salían”. B4: “Pues he aprendido cosas de los demás porque yo antes tenía un modo de hacerlas y ahora he aprendido más cosas de los demás”. B6: “Cuando por ejemplo alguien en mi grupo no entiende una cosa, pues si yo le explico y no la entiende puedo ir buscando otras maneras. Se las explico cuando no las entienden, y si no la entienden, puedo buscar otros métodos para explicárselo, además eso ayuda en mi vocabulario y cosas así”. A7: “Hemos ayudado a otros compañeros que lo necesitaban para aprender”. A8: “Me han ayudado con los ejercicios” y, por último, B9: “Porque me daban más soluciones para hacer los problemas”. De los 22 alumnos participantes, seis de ellos (27,3%) hicieron referencia al aprendizaje.

A la última pregunta “¿Qué prefieres, aprendizaje individual o cooperativo?” los alumnos respondieron:

B6: “Trabajar en grupo, porque yo pienso que trabajar en grupo no es sólo hacer deberes y así, también es… ehhh… porque tengo debate y si yo digo una cosa y está mal tengo otra persona que me va a corregir y a enseñar”. El 95,5% indicó que prefería el aprendizaje cooperativo. Sólo un alumno contestó que le gustaban ambos aprendizajes.

Alumna exponiendo a sus compañeros

Alumna exponiendo a sus compañeros

CONCLUSIONES

En el presente artículo se han recogido los datos de la encuesta realizada antes de la formación en este proyecto. Entre los resultados obtenidos del profesorado destaca la utilización de libros de texto, aunque la totalidad de los participantes elaboran sus propios materiales como ayuda o complemento de su labor docente. También resultó significativo el porcentaje de participantes que respondieron “no sabe, no contesta” respecto a los efectos que el aprendizaje cooperativo tiene en distintos aspectos relacionados con el alumnado y la gestión de un aula. Sin embargo, se halló un porcentaje superior al 70% en las percepciones del profesorado en cuanto a que el aprendizaje cooperativo mejora la motivación y la capacidad de trabajo en equipo. Por otra parte, con la implantación de dispositivos digitales como herramienta del proceso de enseñanza-aprendizaje, se ha pretendido que los profesores utilicen recursos ya existentes en la red y que conozcan diferentes aplicaciones digitales; no obstante, los resultados respecto a dichos dispositivos se tendrán en cuenta en futuros estudios que se desprendan del Proyecto de Innovación Educativa.

En cuanto a los resultados obtenidos del estudio con los alumnos, tras la experiencia realizada se ha visto que esta metodología ha favorecido, en líneas generales, la motivación del alumnado, por lo que es valorada muy positivamente por los profesionales del centro. Una vez analizados los resultados, los datos obtenidos muestran que un alto porcentaje del alumnado valora de manera favorable el aprendizaje cooperativo, considerando que ha influido en su proceso de aprendizaje, en su crecimiento personal y en el desarrollo de habilidades interpersonales. Con dichas estrategias consiguen gestionar su propio conocimiento, pudiendo explicarlo con mayor claridad al compañero y ser agentes activos de su propio proceso de aprendizaje. Además, muchos de los participantes han atribuido a esta metodología el incremento de su autonomía, la responsabilidad con las tareas y una mayor eficacia en la gestión del tiempo. En conclusión, los estudiantes han percibido un mayor control sobre su aprendizaje, por lo que han atribuido al aprendizaje cooperativo la consecución del logro orientado hacia sí mismos y a su relación con los demás. Queda pendiente como objetivo a medio plazo la realización de un estudio en el que se aborden las percepciones del alumnado en torno al aprendizaje con dispositivos digitales a través del aprendizaje cooperativo. El tiempo transcurrido hasta la dotación del material específico hizo que el profesorado se involucrara, en primer lugar, en el manejo de esta metodología. Hay que añadir algunas limitaciones en el estudio, como la no realización de un post-test entre los docentes que reflejase longitudinalmente los posibles cambios en las concepciones sobre el aprendizaje cooperativo tras su implementación en las aulas. Aspectos como éste podrán ser tenidos en cuenta en trabajos posteriores.

BIBLIOGRAFÍA

Añón, J. G., y Roig, M. J. A. (2009). Teorías de la justicia y aprendizaje cooperativo: enseñanza a través del método de grupo puzzle (utilizando el aula móvil y el aula virtual). En Actas del II Congreso de Innovación Docente en Ciencias Jurídicas [Recurso electrónico] (p. 25). Facultad de Derecho.

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Ferreiro, R. (2003). Estrategias didácticas del aprendizaje cooperativo. El constructivismo social: una nueva forma de enseñar y aprender. México: Trillas.

Ferreiro, R. (2012). La pieza clave del desarrollo de la creatividad: la escuela. Revista Iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación, 10, (2).

Kagan, S. (1994). Cooperative Learning. California: Kagan Cooperative Learning. 

Mendoza, R. (2006). Investigación cualitativa y cuantitativa. Diferencias y limitaciones. Perú: PIAURA.

Pliego, N. (2011). El aprendizaje cooperativo y sus ventajas en la educación intercultural. Hekademos, Revista educativa digital. Nº8, Abril. ISSN:1989-3558.    

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Fecha de publicación: 01 de febrero de 2016