¿Qué es y por qué ?

Es un espacio y unos tiempos  pensados para dar la oportunidad a los niños de la escuela infantil, ubicada en un medio urbano,  de acercarse al mundo natural de una forma lúdica, activa y llegando más allá de una mera observación y manipulación de los objetos. Tenemos presente que estas dos acciones son los principales e ineludibles recursos que poseen los niños para aprehender el mundo, pero pensamos que si les mostramos las cuestiones relacionadas con la naturaleza de una forma con la que tengan la posibilidad de ejercer y desarrollar otras capacidades y acciones cognitivas y actitudinales, conseguirán un conocimiento más interrelacionado e interiorizado con el que construirán  una mejor  valoración y  respeto hacia el medio natural. Por así decirlo: cuando mejor se conoce algo más fácil será respetarlo y cuidarlo.

Se trata, entre otras cosas, de un trabajo en valores realizado desde la cotidianidad de las experiencias y de los aprendizajes, buscando en última instancia el inicio en la creación de una conciencia medioambiental que sea adecuada a los tiempos que les tocará vivir. En definitiva en El Rincón de la Naturaleza nos proponemos que los niños aprendan a conocer, valorar, cuidar y respetar el material que en él se contiene, la reutilización de los materiales y la representación y comunicación de sus experiencias favoreciendo el que asuman la parte de responsabilidad que les corresponde en relación con el cuidado del rincón.

Los niños y niñas de la escuela viven en un medio muy urbano y un gran porcentaje pertenecen a familias con bajo nivel económico, lo que supone viviendas pequeñas, en algunos casos con deficiencias higiénico-sanitarias, pocos medios para salidas al campo, de vacaciones, al Zoo... y la escuela puede y debe, en parte, compensar estas carencias. A este respecto es de gran importancia  el jardín de la escuela que ofrece a los niños un espacio privilegiado para jugar al aire libre dentro de la ciudad, porque es lugar seguro y limpio donde los niños se acercan al medio natural y donde tienen la posibilidad de tener múltiples experiencias sensoriales, motrices, plásticas y de interacción con los demás. Pero el espacio interior del centro también nos ofrece unas grandes posibilidades en cuanto que es un espacio que posee unas características arquitectónicas que le dan un carácter abierto e integrado con el espacio exterior (jardín y parque). Además es amplio, luminoso, bien ambientado y adecuado a sus necesidades. Por estas razones hemos querido seguir reflexionando  sobre las posibilidades que nos ofrece este espacio, incidiendo en él, transformándolo y adaptándolo según nuestra intención educativa. De esta mirada sobre los espacios, surge la adecuación del fondo del vestíbulo de entrada  de la escuela como Rincón de la Naturaleza.En él hay plantas, un canario, dos tortugas, unos peces y una serie de objetos relacionados con el mundo natural como piedras pequeñas, conchas, semillas, frutas, palos, frutos secos, cáscaras, piñas, etc. Existen diversos libros, revistas, cuentos y álbumes fabricados por los adultos llenos de imágenes sobre la naturaleza (las llamamos las Enciclopedias y contienen imágenes y pequeñas explicaciones sobre animales, plantas, paisajes, campesinos, etc). Tenemos también animales de juguete, puzzles y encajes relacionados con el mundo natural. Todo este material se encuentra situado a la vista y al alcance de los niños. Después estarían diversos útiles como la regadera, lupas, contenedores, una máquina de fotos,...y el material fungible necesario para los trabajos de expresión y comunicación (papel, pinturas, plastilina,...).

¿Qué hacemos y cómo lo hacemos?

Partiendo de los principios que guían nuestra labor educativa como son el bienestar, la individualización, la diversidad, la afectividad , la autonomía, la seguridad, la globalidad, la significatividad de las propuestas, la motivación en la construcción de sus aprendizajes, la interacción con el medio, la socialización , el trabajo en equipo, la participación de las familias, etc, hemos organizado la actividad en el Rincón de la Naturaleza de la siguiente manera:

El trabajo se realiza en pequeños grupos (de 6 a 8 niños) y empleamos un tiempo aproximado de entre 30 y 40 minutos. Existen tres momentos principales:

El primero es la observación y cuidado de los animales y plantas: Los niños observan si les falta comida, si hace falta regar las plantas y ayudan al educador a realizar estas tareas. En definitiva en este momento los niños observan, preguntan, tocan, saludan y asumen responsabilidades. Además aprenden el cuidado y respeto de los seres vivos, con los que construyen una relación más cercana (cada animal tiene su nombre - La tortuga ya no es solo eso sino que es Nicolasa-). Esta relación afectiva da un sentido a la tarea de cuidar de ellos y la hace mucho más significativa.

En un segundo momento nos proponemos acercar a los niños al mundo natural a través de los libros, los cuentos, la lectura de imágenes, las canciones y la propia manipulación in situ de los propios elementos naturales. Aquí entra en juego un elemento de sorpresa, de motivación y de emoción: El Tronco: Se trata de un tronco hueco (fabricado con papel continuo y unos cubos)que tiene como función contener todo tipo de material nuevo que quiera ser integrado en el Rincón de la Naturaleza. En un principio nos habíamos propuesto la creación de un personaje fantástico que fuera quién llenase el tronco, pero nos ha parecido más positivo presentar este objeto motivador y de ilusión a la comunidad educativa para que aporten todo el material que consideren de interés para el Rincón.

Con lo que sacamos del tronco (cada día una cosa previamente seleccionada) proponemos a los niños un momento de corro (o sentados alrededor de una mesa) para descubrir, en su más amplio sentido, los nuevos objetos.(hojas de diferentes tipos, frutos secos, cáscaras, conchas, hielo, nieve, pétalos, palos, arena, fotografías, libros, plantas, etc). Se trata de que los niños observen, manipulen, escuchen, pregunten, investiguen y disfruten; y de que el adulto ofrezca varias posibilidades de actividad y de participación activa de los niños, motivando a realizar pequeños descubrimientos y a tomar conciencia de ellos, provocando la expresión y comunicación de sus experiencias a través de diversos lenguajes. Los objetos que vamos sacando del tronco se incorporan a los estantes del Rincón.

Por último, la tercera parte está pensada y estructurada para que los niños puedan realizar una actividad de juego libre. Para ello tendrán a su alcancen diferentes materiales como son libros de imágenes, las Enciclopedias, las pinturas, el material para juego simbólico y los objetos naturales que ya conocemos con anterioridad. En este espacio los niños se expresan, manipulan y observan los objetos libremente estando el adulto atento a fomentar estas acciones y a darles un mayor sentido.

También es necesario hacer referencia a los espacios anexos al Rincón de la Naturaleza como son el jardín como espacio natural, la terraza dónde hay plantas más grandes y el taller de plástica donde los niños realizarán sus producciones utilizando elementos naturales (hojas, palos, arena,...)

Quisiéramos resaltar que el Rincón de la Naturaleza esta pensado para que sea un espacio abierto y accesible para las familias (por ello se encuentra situado en un extremo del vestíbulo de entrada ala escuela). Muchas de las familias aprecian su valor como elemento motivador para el disfrute y aprendizaje de sus hijos. A veces por su propia curiosidad, y a veces por complacer a los niños, se acercan a este espacio y se implican con los niños en juegos a los que quizás de otra manera no hubieran dedicado tiempo ni atribuido el valor que en la escuela se da a estas actividades; descubriendo así, nuevas formas de relación con sus hijos.