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Visor

Andrés Antolín. Director de EWA, un ejemplo de formación dual

 

Resumen

“El concepto dual parte de la idea de que los estudios teóricos y la formación práctica en la empresa han de suponer un engranaje.”

“Estoy convencido de que el principio de dualidad, no solo en los estudios superiores, sino también en la formación profesional, irá cobrando fuerza en los próximos años.”

Andrés Antolín Hofrichter es doctor por la Universidad de Fiburgo (Alemania), donde estuvo becado por el Freiburg Institute for Advanced Studies. Su trayectoria de investigador y docente le llevó, entre otras estaciones, a la Universidad de Zúrich así como a LMU de Múnich, participando activamente en conferencias en España, Italia, Alemania y Suiza. Antes de emprender su carrera universitaria cursó una FP dual hispano-alemana de técnico de gestión de empresas, por lo que el sistema dual está un sus orígenes formativos. Desde 2018 es director de la Europäische Wirtschaftsakademie.

Perfecto conocedor de la formación dual explica, en esta entrevista, las características y beneficios de este sistema.

Revista Digital Educamadrid

Fecha de publicación 14 de diciembre de 2018

Entrevistas

EWA Academia Europea de Economía, un ejemplo de formación universitaria dual

Vídeo

Formación Dual

 

Autor

Andrés Antolín

Director EWA Europäische Wirtschaftsakademie - Academia Europea de Economía

Andrés Antolín

¿Qué es la Europäische Wirtschaftsakademie? ¿De dónde proviene?

La Europäische Wirtschaftsakademie, traducido al español, Academia Europea de Economía, somos un Centro docente dedicado a los estudios duales. Se trata, sin duda, de un centro pionero: fundado en 1991, es decir, hace ya 27 años, surgió de la iniciativa de algunas grandes empresas alemanas en España que, ante la falta de orientación práctica de la mayor parte de las carreras universitarias, vieron en los estudios duales una oportunidad de participar en los procesos formativos, apostando por una estrecha relación entre Universidad y empresa. La EWA ofrece hoy una carrera dual de Administración y Dirección de Empresas en colaboración con la Universidad de Alcalá y la Duale Hochschule Baden-Wüttemberg, que es, con sus 35.000 estudiantes, la mayor universidad pública alemana en modalidad dual.

¿Qué se entiende por una carrera dual? ¿En qué se diferencia de una carrera, digamos, “clásica“?

En primer lugar, cabe señalar que no existe un concepto perfectamente definido de lo que debe entenderse bajo “carrera dual“, por lo que los planes de estudio pueden diferir dependiendo del país o la Universidad. No obstante, todas ellas tienen en común la fuerte orientación hacia las prácticas. En realidad, el concepto dual parte de la idea de que los estudios teóricos y la formación práctica en la empresa han de suponer un engranaje. En EWA, por ejemplo, los estudiantes aplican en la empresa formadora lo que han aprendido en clase, alternando teoría y prácticas en bloques de tres meses. Para ello es necesario que, en el transcurso de los tres años que dura la carrera, el estudiante haya pasado por los departamentos más importantes, ya sea de Contabilidad, RRHH, Logística y Almacén, Ventas, Compras... Es esta coordinación entre los planes de estudios y los de formación en empresa desde el primer año lo que marca la diferencia con respecto a las carreras no duales.

¿Cuáles son las ventajas del sistema dual? ¿Existen también desventajas?

Desde el punto de vista del estudiante, la principal ventaja es que aprende como funciona una empresa desde el primer momento. De ese modo no solo obtiene conocimientos y habilidades prácticas, mejorando sustancialmente su empleabilidad posterior. Además, la experiencia acumulada en la empresa cambia su perspectiva sobre los conocimientos que adquiere en las aulas. Más allá de esto, en algunas carreras, como en el caso de EWA, los estudiantes reciben una remuneración, que para muchos supone un incentivo añadido.
La empresa, por su lado, obtiene la posibilidad de participar activamente en la formación de los que serán sus futuros empleados, pudiendo así adaptar los perfiles a sus necesidades. Al finalizar la carrera, el estudiante conoce perfectamente la empresa, se identifica con sus valores y rinde plenamente desde el primer momento. Evidentemente, participar en un programa dual requiere un esfuerzo por parte de la empresa, pues tiene que asignar tutores y coordinar los planes de formación, entre otras tareas. De ahí que, generalmente, solo inviertan en el sistema dual empresas con un fuerte compromiso con la formación y con una planificación de personal a medio y largo plazo.
Eso sí, el sistema dual no se presta para todas las ramas de conocimiento. Para algunas carreras, como por ejemplo Administración y Dirección de Empresas o algunas Ingenierías, supone un modelo extremadamente útil, un modelo que, en cambio, no tiene por qué ser el más adecuado para otras de índole más teórica.

¿Qué perspectivas de futuro crees que tienen los estudios duales en España?

Estoy convencido de que el principio de dualidad, no solo en los estudios superiores, sino también en la formación profesional, irá cobrando fuerza en los próximos años. De hecho, algunas Universidades ya han empezado a ofrecer programas duales, si bien, como he dicho al principio, lo que se entiende bajo „dual“ puede diferir mucho de una Universidad a otra. En todo caso, a mi modo de ver, sería deseable que su implantación tuviera un cierto grado de coordinación, aprovechando, a ser posible, la experiencia acumulada de instituciones del ámbito internacional.


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Revista Digital EducaMadrid
Fecha de publicación: 14 de diciembre de 2018