El relación a los riesgos para la salud física de los jóvenes, debemos hablar en primer lugar de los riesgos para la salud derivados de la sobre-exposición a las tecnologías.

Fatiga postural. El tiempo ante las pantallas puede provocar en primer lugar fatiga postural, en la que podemos observar los siguientes síntomas: 
- Movilidad restringida debido a hábitos cada vez más sedentarios.
- Malas posturas, molestias y lesiones de columna y extremidades asociadas a la forma de sentarse.
- Malas posturas debidas a una flexión constante del cuello, con molestias musculares asociadas en las cervicales y parte alta de la espalda. 
- Malas posturas asociadas a la posición de los brazos, muñecas y manos, provocadas por la falta de apoyos adecuados en codos y muñecas, así como molestias y lesiones en los pulgares, derivadas de las nuevas formas de escritura a la hora de sostener los dispositivos móviles.

Fatiga visual. En este caso hablamos de fatiga visual provocado por hábitos incorrectos de acomodamiento visual e insuficiente lubricación del ojo for falta de pestañeo. Otro  factor puede ser el exceso o defecto de luz ambiental, los reflejos en la pantalla  por focos lumínicos indirectos o configuración inapropiada de las funciones de contraste y brillo del propio dispositivo (por exceso o defecto de luz en la pantalla).

Golpes y contusiones. En ocasiones, se producen distracciones, golpes y caídas mientras se utilizan dispositivos al mismo tiempo. Los menores están absortos con lo que ocurre en la  pantalla y no prestan atención al resto de estímulos que provienen del entorno,  desde una escalera o un obstáculo que no llegan a ver, como a situaciones inesperadas al andar por la calle (pensemos por ejemplo, en un incidente de  tráfico, un cambio en el semáforo que no observan, etc.).