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Visor

Metamodelo de precisión del lenguaje

Hablar no cuesta nada, según se dice; sin embargo, las palabras tienen el poder de evocar imágenes, sonidos y sentimientos en el oyente. El lenguaje es una herramienta de comunicación y, como tal, las palabras significan lo que la gente acuerde que signifiquen. Pero... no todos compartimos exactamente el mismo mapa. Cada uno de nosotros experimenta el mundo de una forma única. Las palabras están, en sí mismas, vacías de significado, como se hace evidente cuando se escucha una lengua diferente a la propia. Damos significado a las palabras mediante las asociaciones ancladas a objetos y experiencias de la vida. Podríamos pasarnos horas discutiendo sobre el significado de palabras abstractas como “belleza”, “respeto” o “amor”. Significan cosas distintas para cada persona.

 ¿Cómo sabemos que hemos entendido a alguien? Dando significado a sus  palabras; nuestros significados, no los de la otra persona; y no hay garantía de que los dos significados sean los mismos.

El lenguaje es un filtro poderoso para nuestras experiencias individuales. Canaliza los pensamientos  hacia unas direcciones, facilitando pensar de unas formas y dificultando pensar en otras. El lenguaje realiza distinciones pertinentes en unas áreas u otras dependiendo de lo que sea importante para esa cultura. Los esquimales tienen muchas palabras distintas para la única palabra “nieve” en español. Su vida puede depender de la correcta identificación de un tipo de nieve. El pueblo hanuoo de Nueva Guinea tiene un nombre distinto para 92 variedades de arroz; es extremadamente importante para su economía. El mundo es tan rico y variado como queramos hacerlo.

Los buenos comunicadores explotan los puntos fuertes y débiles del lenguaje. Ser capaz de emplear las palabras precisas que tendrán significado en los mapas de los demás, y determinar de manera precisa lo que una persona quiere decir con las palabras que usa, son unas habilidades valiosísimas en la comunicación.

El metamodelo es un mapa del lenguaje muy útil que evita comunicaciones “imposibles”. Es una herramienta para tener un mejor conocimiento de lo que la gente dice y cómo se transformas los pensamientos en palabras. El lenguaje nunca puede equipararse a la velocidad, variedad y sensibilidad de nuestros pensamientos; sólo puede ser una aproximación. Un hablante puede tener una idea completa y total de lo que quiere decirà estructura profunda. Lo que hacemos es acortar esta estructura profunda para hablar con claridad, y lo que realmente decimos se llama estructura superficial.

            El metamodelo reconecta el lenguaje con las experiencias y puede usarse para:

  1. Recoger informaciónà permite reunir información de alta calidad cuando es importante entender exactamente lo que quieren decir los demás.
  2. Aclarar significadosà proporciona un marco sistemático preguntando: “¿Qué quieres decir exactamente?”
  3. Identificar limitaciones y abrir nuevas opcionesà  los límites existen en las palabras, no en el mundo. Hacer preguntas y encontrar las consecuencias o excepciones puede abrir grandes áreas de la vida al identificar y cambiar creencias limitativas.

El metamodelo habla de significados precisos pero el lenguaje también puede usarse de una forma vaga e imprecisa. Esta forma de emplear el lenguaje se conoce como el modelo de Milton. En él, el lenguaje se emplea con el fin de poder contactar con recursos escondidos de nuestra personalidad.

¿Cómo puede saber lo que una persona está pensando? No se puede. Hay un arte de usar el lenguaje de una forma tan vaga que el otro le da el significado apropiado. El metamodelo recupera información que había sido eliminada, distorsionada o generalizada. El modelo de Milton es el reflejo en un espejo del metamodelo. El oyente debe llenar los detalles y buscar activamente el significado de lo que oye a partir de su propia experiencia. Usted le pone un contexto con el mínimo contenido; le da un marco y deja que él elija el cuadro a poner. Cuando el oyente pone el contenido, se asegura usted de que le dará el significado más adecuado e inmediato a lo que usted dice. Por ejemplo, imagínese que le dicen que ha tenido una experiencia importante en el pasado; conno le dicen cuál, así que usted busca en el pasado y escoge la experiencia que, en ese momento, le parece más pertinente.

METAMODELO DE PRECISION DEL LENGUAJE

OMISIONES

 

Distorsiones

Retos

Sustantivos inespecíficos

“Es cuestión de opinión”

“Qué o quién concretamente”

Verbos inespecíficos

“Me ayudó”

“Concretamente cómo”

Comparaciones

“Juan es el mejor”

“Comparado con quién/qué”

Juicios

“Es el candidato ideal”

“Según quién”

Nominalizaciones

“No hay buena comunicación”

“Qué no comunican”

 

GENERALIZACIONES

 

Distorsiones

Retos

Operadores modales de posibilidad

“No puedo hacerlo”

“Qué pasaría si ...”

“Qué se lo impide”

Operadores modales de necesidad

“Debo hacerlo así”

“Qué pasaría si ...”

Cuantificadores universales

“Todos son parecidos”

“Nunca haces nada bien”

“¿Todos?”

“¿Nunca?”

 

DISTORSIONES

 

Distorsiones

Retos

Equivalencia compleja

“No me atiende porque no me mira”

“¿Cómo es que esto significa lo otro?”

Presuposición

“Por qué no prestas atención”

“¿Qué le hace creer que ...”

Causa-efecto

“Me aburres”

“¿Cómo es que ...?

“¿Qué debería pasar para que no fuera así?””

Lectura de pensamiento

“No me aprecia”

“Está triste”

“¿Cómo lo sabes?”

”¿En qué te lo parece?”