Cuando se producen catástrofes naturales o provocadas por el hombre, o situaciones que alteran la dinámica de funcionamiento colectivo en la sociedad, niños y niñas sufren las consecuencias de estas situaciones, en muchos casos sin entender exactamente qué es lo que ocurre, entre otras cosas porque aún no tienen, en algunos casos capacidad para entenderlo. Diversos estudios científicos han analizado la relación entre el paso por este tipo de situaciones y el posterior desarrollo de problemas de comportamiento, del estado de ánimo e incluso Trastornos como el de Estrés Postraumático. Dichas investigaciones han revelado que el principal factor de protección que se descubrió en los niños y niñas fue algo denominado resiliencia.

La resiliencia es la capacidad para salir de una situación difícil o complicada, que suele generar estrés y malestar, reforzado o con más recursos que antes. No es meramente aguantar, sino hacer algo y modificar nuestra manera de afrontar las cosas para salir más fuertes y mejor preparados de una situación como ésa. En el caso de la crisis relacionada con el COVID-19 que estamos viviendo en estos tiempos en nuestro país, se han visto alteradas muchas costumbres y hábitos, las rutinas se han interrumpido, desde la de ir al colegio hasta la de salir al parque a jugar con otros pequeños. Por ello, en una situación como ésta, es especialmente importante que las familias ayuden a sus niños y niñas a desarrollar esta capacidad de salir adelante, y sentirse cada vez más fuertes ante las adversidades.

En estos materiales, se ofrecen algunas recomendaciones a las familias, sencillas y fáciles de hacer, para que promuevan el desarrollo de la resiliencia en sus hijos e hijas.

Escoge el que más te interese.

ESTRUCTURACIÓN

PARTICIPACIÓN ACTIVA

RECONOCIMIENTO

EJEMPLO

SOLIDARIDAD SOCIAL

ACTITUD POSITIVA

OPTIMISMO