La localidad serrana de Ubrique, en Cádiz, se ha especializado en la industria de la marroquinería (trabajo de la piel y el cuero para la fabricación de bolsos, carteras y otros complementos).
En Ubrique operan unos 200 fabricantes de este sector de actividad, que dan empleo directo a unos 6.500 trabajadores, y concentran aproximadamente el 40 % de la producción a nivel nacional (parte de esta producción suministra a grandes firmas de lujo francesas e italianas).
El sector ha logrado resurgir, tras una grave crisis, gracias a su apuesta por la artesanía, el trabajo bien hecho, el diseño, la calidad y la innovación.
La crisis se desencadenó a partir de 2003 y trajo consigo la deslocalización hacia China de muchos fabricantes, llevándose por delante el 50 % de la producción y el 20 % de los empleos, lo que puso en serio riesgo el futuro del sector en Ubrique.
Pero poco a poco el sector ha ido recobrando su esplendor, gracias a la puesta en marcha de iniciativas como:
- El Centro Tecnológico de la Piel (MOVEX): Es una fundación sostenida por la asociación de fabricantes del sector de Ubrique. Cuenta con apoyo público. Ayuda a las empresas del sector a incorporar las tecnologías más actuales (impresoras digitales, aparatos de corte, cámaras climáticas para acelerar el envejecimiento de la piel. etc.). Se busca con ello que puedan desarrollar nuevos productos y servicios, sin por ello perder su esencia artesana, sus técnicas tradicionales y su saber hacer.
- La Escuela de Artesanos de la Piel, que funciona desde 2014 y ocupa unas instalaciones cedidas por el ayuntamiento de Ubrique.
Artículos:
Ubrique, tradición en la piel (El País Semanal, octubre de 2016)