Buenas tardes a todo el profesorado del instituto Francisco Giner de los Ríos:

Con motivo de la llegada del fin del curso 2015-16, me he tomado la libertad de escribiros esta carta en un rato libre que tenía simplemente para deciros y agradeceros algo que quizá no se os agradece lo suficiente. Cada día que nos enseñáis algo nuevo o nos dais una lección valiosa que, en el futuro, sin duda, nos servirá para alcanzar nuestros sueños y metas. Gracias a todos vosotros por despertaros cada mañana con el único objetivo de insuflar conocimiento y esperanza a cada uno de nosotros, por animarnos a hacer lo que más nos gusta y preocuparos más por nuestro futuro que nosotros mismos, por todos esos momentos que nos ofrecéis cada día de la semana y que siempre quedarán grabados en nuestra memoria como fotos que uno quiere ver cuando quiere recordar buenos momentos. Me fascina cómo puede el espíritu de unas personas como vosotros ser inquebrantable y seguir trabajando a pesar de un mal día o cansancio. Para algunos de nosotros, vosotros siempre seréis ese modelo a seguir, esa luz dentro de la oscuridad que nos hace decaer cuando estamos afligidos, ese espejo en el que nos vemos reflejados ya que, aunque haya gente que no lo sepa, habéis tenido que pasar por lo mismo que nosotros.

A algunos de vosotros os veo el año que viene, pero a otros no, así que a todos aquellos que os marcháis que sepáis que aquí hay alguien que nunca os olvidará y siempre os tendrá presente en cada recuerdo y si el destino lo quiere, no hay porque perder esa amistad que se ha creado en este año que hemos compartido. A los que sí os veré el año que viene, os doy un hasta luego puesto que estos meses de verano serán un pequeño descanso para comenzar con ganas el año venidero y que, aunque no lo podáis llegar a imaginar, en estos tres meses os echamos de menos.

Agradezco el que hayáis compartido vuestras experiencias y viajes con nosotros, vuestras historias de superación personal, sonrisas y, sobretodo, vuestra sabiduría. El año que viene será mi último año aquí y solo quiero que sepáis que no importa cuántos obstáculos se nos crucen en el camino, pues mientras gente como vosotros siga enseñando, nada consideraremos imposible y nada nos hará darnos por vencidos.

Como dijo un gran hombre una vez: “Lee más, aprende más, hasta cambiar el mundo”.

Dan Munteanu