Expresión oral
- Hacer, antes de hablar, si existe la posibilidad, un breve guión o anotaciones para usarlas solamente como referencia o ayuda al echarles un vistazo de vez en cuando.
- Pensar en el vocabulario fundamental sobre el tema que debemos mencionar, y utilizarlo para poder para lucirnos.
- Mencionar los puntos obligatorios y usarlos como argumento y guión, e incluso usarlos como comienzo de nuestro discursos oral.
- No contestar ni con una sola frase breve ni usar monosílabos.
- Preguntar al compañero o examinador y tomar la iniciativa de la conversación siempre que se pueda.
- Auto corregirse al momento, si nos damos cuenta de nuestros errores.
- Preguntar si no se entiende algo al compañero o al examinador y hacerles repetir la pregunta o el argumento. Se trata de hablar y entender.
- Intentar llegar a un acuerdo final con el compañero o a una posible solución.
- Sea el tema que sea del que se deba hablar, echarle imaginación y mentir. Sobretodo utilizar frases, estructuras o vocabulario correctos; aquello de lo se esté seguro y se domine y reutilizar lo aprendido. No se debe ni inventar estructuras o palabras sobre la marcha ni traducir.
- Si no se sabe que decir sobre un tema, recomendamos pensar en: los problemas y las soluciones, las causas y los efectos, las ventajas y los inconvenientes, la situación pasada y la actual, comparar entre países, etc. Así tenemos mucho que decir.
- Expresar siempre la opinión personal sobre el tema y mencionar experiencias personales y dar ejemplos.
- Reutilizar en todo momento lo aprendido y aquellas estructuras que sabemos que son correctas. Soltar esas frases y expresiones hechas que nos hemos aprendido de memoria y que puedan servir para cualquier situación o tema.
- Para ganar tiempo y poder pensar nuestras respuestas, recurrir a breves pausas discursivas usando elementos de relleno, coletillas del tipo; bueno, eh, comprendo, etc.
- Si nos bloqueamos o no sabemos que decir, simplemente repetir o resumir en alto lo que ya se ha dicho, a modo de resumen.
- Si nos falta vocabulario concreto, podemos parafrasear, o como último recurso recurrir a nuestros conocimientos de otros idiomas y arriesgarnos a usar palabras que creemos que nos pueden valer para salir del paso.
Importante es intentar no caer en silencios o pausas largas, respetar el discurso ajeno y cumplir el tempo exigido.
Recomendaciones propuestas por Lola Rogríguez Cemillán,
Catedrática de Alemán, EOI Fuenlabrada
(ALEMANEOIFUENLABRADA@telefonica.net)