La escuela como comunidad educativa constituye una compleja realidad formada por los alumnos, educadoras y las familias que se encuentran en un espacio con el fin de emprender la tarea educativa fundamentalmente dirigida a los niños y niñas, pero en la que también están presentes los intereses y necesidades de los adultos y de una sociedad que trasmite sus propios valores. Es necesario aunar todos esos elementos y el medio en que se insertan, gestionarlos de manera democrática pero garantizando una organización adecuada de todos los profesionales y demás adultos implicados. La toma de decisiones conjuntas y la toma de acuerdos y medidas educativas y organizativas que favorezcan la actuación coordinada de los miembros del equipo educativo y de las familias de manera que se propicie y se establezca una coherencia educativa.

     Por esto apostamos por una relación y una coordinación familia – escuela, fundamental en las edades tempranas de nuestros alumnos;

• Contacto diario con las educadoras en las entradas y salidas, produciéndose un intercambio de información relativa a los niños/as.
• Tutorías individuales a petición de las familias o de la escuela.
• Reuniones de aula al comienzo del curso y una vez al trimestre para informar de las actividades previstas en la programación trimestral, información sobre la evolución del grupo, etc
•  Información diaria a las familias a la hora de la recogida de los niños/as (agenda escolar).
• Charlas a padres sobre temas de interés
• Participación en fiestas (navidad, carnaval, final de curso…)
• Consejo Escolar: tres representantes de las familias
• Circulares, correos, etc
• Aportando sugerencias e ideas que nos ayuden y repercutan de manera positiva en toda la Comunidad Educativa.