Aprovechamos una pared de un depósito de agua que tenemos en el jardín del taller de jardinería para pintar un mural. Ahora el jardín parece más grande ¡Y más bonito!

Hemos utilizado pintura para exteriores al agua para facilitar el lavado de materiales. Para extender la pintura sobre la pared hemos utilizado brochas de diferentes tamaños y esponjas. Para evitar que la pintura chorree al ponerla en pequeños recipientes y tapas para hacer las mezclas de color y para usarlas de 'paleta' utilizamos jeringuillas (sin aguja, claro) de 10 cc.