En este curso hemos abierto un aula para bebés, con una ratio máxima de 8 niños/as.

El periodo desde el nacimiento hasta el primer año, es una etapa de desarrollos fundamentales:

• sensorial
• cognitivo
• motor
• lingüístico

Es una etapa de exploración y grandes descubrimientos, así como de cambios constantes. El/a niño/a adquiere progresivamente más autonomía, y se abre cada vez más al mundo que le rodea.

Quizá por eso, es el aula más especial y delicada, en la que desplegamos todo nuestro cariño y conocimiento al servicio del desarrollo integral del niño/a. Se trata, por encima de todo, de un aula de estimulación, sobre todo en cuanto a la psicomotricidad. Pero también es un lugar en el que trabajar y afianzar la seguridad emocional del niño/a.

Nuestra prioridad en todo momento es dar respuesta a las necesidades básicas de los/as niños/as: fisiológicas, afectivas, de movimiento, de autonomía, de socialización y de descubrimiento del mundo.

Pincha aquí para acceder a la información del aula de 0-1 años.

El aula de 1-2 años tiene una ratio máxima de 14 niños/as.

Animamos a los/as niños/as a explorar el mundo que les rodea a través de una variedad de oportunidades de juego: con arena, hojas (experimentación al aire libre), con todo tipo de materiales y texturas que les estimulan a través de los sentidos. El juego heurístico les aporta multitud de posibilidades para el descubrimiento de determinados objetos y sus características.

En esta edad, los/as niños/as empiezan a caminar, por ese motivo, les ofrecemos diariamente diversos tiempos, espacios y materiales donde experimentar con su cuerpo en el espacio, promoviendo la adquisición de una marcha autónoma y segura. Las sesiones en la sala de psicomotricidad y los juegos al aire libre, les facilitan la adquisición y el afianzamiento de la marcha, junto con la exploración de sus capacidades motrices.

Pinchad en la imagen para acceder a la información de 1-2 años.

Las aulas de 2-3 años tienen una ratio máxima de 20 niños/as. 

Los/as niños/as van consiguiendo progresivamente los objetivos a través de múltiples actividades y experiencias que favorecen la relación con sus iguales y fomentan su autonomía, que les ayudarán en su paso al "cole de mayores".

En esta etapa, los/as niños/as tienen acceso a una amplia variedad de actividades que facilitan la adquisición de conceptos lógico-matemáticos, la ampliación del lenguaje, el reconocimiento y expresión de sentimientos y emociones (tanto en sí mismos/as como en sus amistades).

Algunas de las actividades propuestas son: conocer a sus iguales y a los adultos que intervienen diariamente en la vida del centro, la experimentación con diferentes objetos y texturas (elementos naturales, masa de sal, harina, arroz, lentejas, cajas de cartón, hueveras, construcciones y juguetes de madera...), ejercicios motrices finos y gruesos (sesiones de psicomotricidad en la sala y al aire libre), experiencias plásticas con diversos materiales (pintura de dedos, gelatina, rotuladores),...

Una parte fundamental de esta etapa es el la aparición del juego simbólico: es la capacidad del pequeño/a para imitar situaciones de la vida real y ponerse en la piel de otras personas. Se trata de una actividad que le ayuda a ampliar su lenguaje, desarrollar la empatía y, sobre todo, consolidar sus representaciones mentales. También es una vía para que el/la niño/a canalice sus preocupaciones e incluso le permite encontrar soluciones a sus conflictos, ya que recrea diferentes situaciones a través del juego.

Una prioridad para el equipo educativo es apoyar a los/as pequeños/as en el desarrollo del lenguaje. Sabemos que la música es un elemento fundamental en esta etapa ya que ayuda al desarrollo intelectual, auditivo, sensorial, motriz, emocional, afectivo y del habla. Y los cuentos despiertan su curiosidad y enriquece su vocabulario. 

Pincha en la imagen para acceder a la información de 2-3 años.