Nuestro entorno. La ciudad
No se tiene certeza de al antigüedad de nuestro pueblo, pero parece que el asentamiento y fundación del núcleo poblacional se puede concretar a principios del siglo XII y al amparo de la fortificación que los moradores de Alcalá hubieron de realizar para afianzarse en la zona.
Del período Calcolítico, donde ya existían varios asentamientos en las orillas de los ríos Henares y Jarama, se han encontrado algunos restos de vasijas de cerámica campaniforme que confirman la existencia de algunos asentamientos dentro del término municipal.
El el siglo II Complutum, asentamiento romano y base de la actual Alcalá de Henares, era una ciudad floreciente y con una gran importancia estratégica, pues dominaba todo el valle del Henares. Muchos romanos adinerados establecieron su residencia dentro del término de Torrejón, gobernando a la servidumbre que se encargaba de cultivar los campos que rodeasen la hacienda. Los excedentes del producto de la tierra, principalmente cereales y hortalizas, permitía abastecer a parte de la población de Complutum.
En el año 711 se produjo la invasión musulmana que dio como resultado la ocupación del solar ibérico, por lo que estas tierras debieron reconquistarse y repoblarse.
A finales del siglo XI se construyó la fortaleza del Castillo de Aldovea y pocos años más tarde se fundó la aldea de Torrejón de Ardoz, recibiendo el nombre probablemente de un torreón que pudiera haber existido para defenderse de los ataques árabes y del arroyo Ardoz que cruzaba el término.
Corría el año 1118 cuando los cristianos, con Alfonso VII, rec
uperaron Alcalá y su tierra, en la que se incluye la fortificación fronteriza de Torrejón.
Durante toda la Edad Media, Torrejón formó parte del señorío eclesiástico perteneciente al Arzobispado de Toledo. La villa más importante era Alcalá y Torrejón solo era uno de los "lugares" o "tierra" de Alcalá, dependiendo de esta a nivel administrativo y jurídico
A principios del siglo XV se construyó la Casa Grande, una casa de labor administrada por Jesuitas cuya finalidad era suministrar cereales, vinos y ladrillos al Colegio Imperial de Madrid, donde estudiaban los hijos de la nobleza
Los habitantes de torrejón (214 vecinos), ya a mediados del siglo XVI, vieron la necesidad de independizarse de Alcalá. Esgrimieron razones como la lejanía con Alcalá, casi 2 leguas, la insuficiencia de recursos propios, el auge de determinadas familias... Piden al Rey Carlos I, a través del propio Arzobispado de Toledo, que se les conceda Carta de Privilegio. Esta carta de privilegio "escrita en pergamino de cuero y sellado con un plomo pendiente en filos de seda a colores" fue dada en la villa de Valladolid (allí estaba la Corte) en día 6 de septiembre de 1554. Cesa entonces el dominio de Alcalá y Torrejón pasa a depender directamente de la Dignidad Arzobispal de Toledo. Pero hay más, Torrejón deja de ser un "lugar" para convertirse en Villa. Geográficamente, Torrejón, ocupaba lo que hoy en día es la Plaza Mayor y los edificios que la rodean entre las calles Ronda del Saliente, Avenida de la Constitución, Ronda de Poniente y Calle de la Cruz, estando los alrededores dedicados a campos de cultivo.
En 1574, ya en el reinado de Felipe II, hubo intentos de comprar la villa por parte de algunos caballeros, los vecinos de Torrejón, enterados del hecho, y sabiendo que no querian pertenecer a ningun señor, solicitan al Rey merced para incorporar la villa a la Corona y Patrimonio Real, y salir de la jurisdicción del Arzobispado de Toledo. La petición la realizó el alcalde ordinario de la villa Juan de Mesa. La Corona, que andaba necesitada de dinero para atender a los ejércitos, y en virtud de licencia que otorgaba un Breve Papa Gregorio XIII, por la que se facultaba al Rey a "dismembrar y apartar perpetuamente algunas villas y otros bienes pertenecientes en cualquier manera a cualquier iglesias... conventos e Dignidades...", accede a lo peticionado por los vecinos de Torrejón. El primer día del año 1575 queda como único señor y propietario de la villa el Rey y el 24 de junio de ese mismo año se otorga Carta de Poder (después de concluir los pagos de las cantidades impuestas por la compra de la jurisdicción). La Villa de Torrejón de Ardoz queda desvinculada del Arzobispado, a excepción de unas tierras en el Soto de Aldovea, que seguirían perteneciendo a la Dignidad Arzobispal de Toledo hasta el siglo XIX.
Desde entonces Torrejón de Ardoz ha sido escenario de algunos acontecimientos históricos como el pronunciamiento de Don Juan de Austria contra el padre Nitard en 1.669, la batalla de Torrejón entre los generales Narváez, Zurbano y Seoane para exigir la expulsión del General Espartero en 1.843 y el suicidio del terrorista Mateo Morral después de intentar asesinar a Alfonso XII en 1.906, si bien esos acontecimientos no afectaron apenas la vida normal de los torrejoneros.
Sí lo hicieron otros acontecimientos como la expulsión de los Jesuitas en 1.776, la ampliación de la Iglesia de San Juan Evangelista a partir de 1.784 y la construcción del ferrocarril en 1.859
Cuando Pascual Madoz realiza a mediados del siglo XIX su Diccionario Geográfico, Estadístico, Histórico de España dice que Torrejón de Ardoz que pertenece a la provincia y audiencia territorial de Madrid, partido judicial de Alcalá de Henares, capitanía general de Castilla la Nueva, diócesis de Toledo.
La población de Torrejón de Ardoz ha sido eminentemente agrícola y ganadera, careciendo de industria y de comercio de interés hasta bien entrado el siglo XX. En los años 40 empiezan a realizarse obras importantes en el municipio, como la instalación de la Base de Automovilismo y el campo experimental del Instituto Nacional de Técnica Aeronáutica; en la década de los 50 comienza a funcionar la Base Aérea Norteamericana...
Empieza a imperar ya una clase trabajadora compuesta por obreros de la construcción y empleados. de 1970 data la construcción de los polígonos industriales y donde antes había huertas ahora se levantan bloques de viviendas. La situación social y económica comenzó a cambiar
En el año 1.955 se instaló la Base Aérea Estadounidense y desde entonces la población de Torrejón tuvo un crecimiento vertiginoso, pasando de menos de ocho mil habitantes en 1.960 a más de veinte mil apenas diez años más tarde.
La construcción de los polígonos industriales en 1.971 supuso un nuevo incremento que llevó la población en 1.975 hasta 42.000 habitantes y en 1.981 a 75.000
Desde entonces el crecimiento se ha reducido y en los siguientes quince años hasta 1.996 la población creció a 88.000 habitantes.
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