Saltar al contenido

Visor

Implicarse en la vida escolar

La implicación de los padres en la vida del centro es una acción que apunta, por su propia naturaleza, a la interacción entre familia y escuela. Por tal motivo es objeto de consideración en el epígrafe relativo a las prácticas efectivas para la interacción entre familia y centro educativo. No obstante, desde el lado de la familia, cabe señalar que la implicación más efectiva es la que se produce a través de las prácticas descritas anteriormente que configuran el ambiente familiar. Los estudios disponibles advierten de que la implicación de los padres en el llamado “currículo del hogar” produce más beneficios sobre el aprendizaje académico de los niños que su implicación en las actividades propias del centro educativo .

En un sentido más amplio, la implicación efectiva significa tener aprecio al centro, valorar lo que hace por la educación de los niños y apoyarlo siempre que sea preciso. Las críticas a la escuela o a sus profesores en el ambiente familiar traslada a los niños un desafecto a la institución que mengua el grado de identificación de los niños con su escuela y, a la postre, incide negativamente sobre su equilibrio y sobre su rendimiento.

Entre las causas del abandono escolar el informe 2005 del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid sobre el Absentismo Escolar ha destacado la contradicción entre los valores de la familia y los de la escuela

La implicación es también disponibilidad para ayudar al centro cuando lo necesite. Los equipos directivos y los profesores recabarán dicha ayuda cuando sea precisa, y en ese momento hay que estar ahí. En todo caso, las relaciones entre padres, que facilita la implicación, permiten tejer apoyos recíprocos en el seno de la comunidad que pueden servir a la escuela, beneficiar el desarrollo personal de los niños y mejorar sus resultados.