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Visor

Facilitar la implicación de las familias en la vida escolar

La implicación de las familias en la vida escolar —entendida como cooperación entre padres y educadores para la mejora de los aprendizajes desde el ámbito familiar— ha demostrado tener fuertes efectos positivos sobre la mejora. De acuerdo con H. J. Walberg[1], sobre 29 estudios realizados con grupos de control, el 91% de las comparaciones resultaron favorables a los niños que habían participado en programas de apoyo familiar en el hogar frente a los que no lo habían hecho por formar parte de grupos de control.

Pero la implicación de las familias en la vida del centro no sólo depende de las actitudes al respecto de los padres de alumnos, de su grado de interés y de su disponibilidad sino también de las de los profesores y equipos directivos, de su apertura y de su receptividad.

La investigación empírica ha puesto de manifiesto la existencia de una serie de circunstancias que limitan, con frecuencia, la implicación de los padres y que pueden alentar, de una u otra parte, comportamientos inadecuados. Entre ellos cabe destacar los siguientes:

  • Los padres consideran de un modo restringido la implicación de la familia limitándola exclusivamente a la asistencia a reuniones y a otras actividades realizadas en el centro y otorgando escasa importancia a las relaciones entre padres e hijos sobre fondo escolar (“currículo del hogar”)
  • Los profesores y directivos del centro presentan unas bajas expectativas sobre la participación y asumen que las familias monoparentales o las de bajo nivel socioeconómico no van a ser capaces de proporcionar a sus hijos el necesario apoyo y orientación en materia escolar.
  • Los profesores carecen de la preparación suficiente para implicar a los padres en actuaciones que faciliten el aprendizaje escolar
  • Los padres tienen jornadas laborales que les dificultan las reuniones con los profesores en el horario escolar
  • Los padres presentan actitudes, basadas en ocasiones en experiencias negativas, que les llevan a evitar, en lo posible, el contacto con el personal del centro

 

 

 


 

[1] Walberg, H.J. y Paik, S. (2000). Effective Educational Practices, IAE/IBE Unesco, Bruselas/Ginebra, 24 pp.  Prólogo de H.J.Walberg