Desarrollar en los alumnos una actitud personal positiva hacia la revisión de sus trabajos y la corrección de los defectos o de los errores
Se trata de desarrollar comportamientos en los niños y en los adolescentes que se aproximen al trabajo intelectual de los adultos expertos, que consideran la crítica como parte sustantiva del proceso de producción intelectual. En el contexto propio del aula, el profesor debe dar la ocasión a los alumnos a someter sus trabajos a crítica, por sí mismos y por otros, de modo que el profesor u otros alumnos efectúen sugerencias sobre su contenido y le permitan corregirlo y mejorarlo. El profesor ha de aprovechar este tipo de sesiones para reforzar tanto los conceptos como los procedimientos, destacar el valor de la crítica y habituar a los alumnos a ensalzar lo positivo y a identificar lo negativo, con la única finalidad de mejorar.
