En qué afecta a la evaluación final este enfoque exigente? Para decirlo brevemente, en prevenir las consecuencias a las que políticas negativas sin duda conducen; esto es, promociones inadecuadas de asignaturas, de cursos enteros y de ciclos; decisiones que, de no cumplirse las condiciones de exigencia mencionadas, no solucionarán el problema de bajos rendimientos sino que lo agravarán.

La investigación educativa de tipo experimental confirma que cuando se practica un modelo de enseñanza exigente, durante el proceso se elevan los niveles finales de rendimiento y las habilidades cognitivas de orden superior (pensamiento crítico, razonamiento lógico, creatividad, etc.), se incrementa la actitud hacia el aprendizaje y se mejora el autoconcepto de los alumnos, entre los efectos más relevantes.

El no seguir ese modelo conduce, al final, a institucionalizar las políticas de mínimos, a revisar benevolentemente los registros de fracaso escolar, a ocultar la realidad; a prolongar innecesariamente la presencia de alumnos en el sistema educativo durante años por efecto de repeticiones y de retrasos; al desajuste entre las cualificaciones y las demandas reales de  las empresas; y al abandono escolar temprano.