El día 7 de abril disfrutamos de una conferencia telemática con el dramaturgo Albert Boadella, “Un pez contracorriente” como él se ha definido en muchas ocasiones.    

 La conferencia iba destinada para todos los alumnos de 2º de Bachillerato. Ellos mismos han extraído las siguientes conclusiones de la charla:

 “El teatro es la síntesis del arte, ya que provoca en el espectador emoción e inspiración, hecho que no siempre sucede en otros géneros literarios ya que se crea una relación entre público y actor gracias a la cercanía y el dinamismo del “directo”. Esa relación entre el espectador y el artista es debida, en parte, al previo entrenamiento vocal y corporal del arte, dado que es esencial el conocimiento y el control de los gestos y voz para llevar a cabo una adecuada transformación en el personaje que se va a interpretar, para revivir las situaciones del personaje y para expresarlo con la fuerza del directo. Es por ello, que incluso la muerte en el teatro resulta más impactante que en la vida real, lo que corrobora la naturaleza artística del teatro“.

(Paula Fernández -2º Bach-E)

 “El teatro es un arte colectivo protagonizado tanto por el actor como por los guionistas o los diferentes técnicos presentes”. Es decir, hace falta la colaboración de un gran equipo: actores, vestuario, técnicos de luces... No obstante, sin duda alguna, el núcleo esencial es el actor. Pues con tan solo un actor y apenas dos espectadores se puede dar un espectáculo teatral. Y bien, ¿por qué dos? Pues porque con uno único sería una simple conversación. Ahora, algo realmente importante también, es la multiplicación de emociones. Es evidente, al igual que ocurre con los aficionados en los estadios, el peso que la multitud, la muchedumbre del público puede llegar a ejercer en los actores, influyendo en su manera de actuar.

“Defiende el código del buen juglar. Un juglar óptimo debe ser individualista, asilvestrado, antidogmático, provocador, sincero, sin sensaciones de transcendencia, capaz de escandalizar, provocar y entretener, mostrando críticas constantes, sin miedo a los riesgos, desconfiado, en contra de lo establecido, vivir en una polémica constante “.

(José Jairo Domínguez- 2º Bach-E)

“El teatro es un espejo para la sociedad, por eso cada situación debe estar cuidadosamente controlada”

(Alonso Ruiz Regacho,-2º Bach-C)                                                                                                                                                                                                                           

 Albert concluyó su exposición con una última reflexión. Pues él está convencido de que las utopías existen. A lo largo de su vida ha logrado hacer aquello que lo produce un placer inmedible y además con una labor social. Tan solo alude a la importancia para que esto sea posible de tener el empeño y saber cómo se debe llevar a cabo aquello que deseamos: trabajando, estrechamente entre todos para conseguirlo.

“No esperes que las cosas vengan de fuera “ Y es que para conseguir una vida extremadamente feliz es necesario luchar, pero sufrir en colectivo no es lo mismo que sufrir individual.

(Irene Abánades Joglar - 2º Bach-E)