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BASES FISIOLÓGICAS DE LA MEMORIA

¿Qué es la memoria?

La memoria es una capacidad o poder mental que nos permite almacenar y recordar información mediante una serie de procesos asociativos inconscientes, impresiones, sensaciones, conceptos e ideas que hemos experimentado en algún momento. Desde un punto de vista neuropsicológico, la memoria se establece como un función neurocognitiva que nos permite registrar, codificar, consolidar, retener y almacenar, recuperar y evocar esa información previamente vista.

El aprendizaje guarda una relación directa con la memoria, se trata de la capacidad de adquirir nueva información y la memoria de poder retenerla y evocarla. Existen un gran número de procesos que son necesarios para que la memoria funcione correctamente, por otro lado, existen una multitud de estructuras neurales que hacen que estos procesos se puedan llevar a cabo.

Existen distintos tipos de memoria. La memoria a corto plazo nos permite retener cierta información durante un periodo de tiempo de unos segundos, por otro lado la memoria a largo plazo nos permite que alberguemos información durante un periodo que puede durar desde minutos hasta años.

Otros tipos de memoria son la episódica, semántica y la procedural.

La memoria semántica guarda datos concretos, es decir, la calle en la que vive, donde se encuentra Italia… la memoria episódica guarda información más personal así como recuerdos, sensaciones y los relaciona con momentos vividos. La procedural es la que guarda datos y movimientos, por ejemplo, nos permite que sepamos montar en bici o conducir aunque llevemos mucho tiempo sin hacerlo, es un tipo de memoria tanto neurológica como motora.

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