En la clase de Física y Química vimos como un tubo fluorescente se encendía al entrar en contacto con una bola de plasma. Después de este suceso surgió una incógnita: ¿Por qué se ilumina el tubo?

¿Qué es una bola de plasma?

Antes de nada, hay que saber qué es este invento creado por Nikola Tesla. Una bola de plasma es una esfera de vidrio grueso situada sobre una base con un dispositivo eléctrico. Dentro de la esfera se encuentra un electrodo central y algo de gas inerte (Neón, kriptón o xenón). Al encender la esfera, el electrodo central produce una corriente alterna de alto voltaje a alta frecuencia, la cual calienta el gas a una temperatura elevada, dividiendo los átomos en iones, creando así el estado de plasma.

Este estado transmite con facilidad la corriente debido a su estado ionizado, esto produce las brillantes corrientes que vemos. Sin un único camino por el que desplazarse, las corriente se mueven y giran alrededor constantemente.

¿Por qué se ilumina el tubo?

Al acercar a la bola de plasma un tubo fluorescente, este se ilumina. Pero, ¿por qué? Esto se debe a que, aunque no podamos verla, la corriente de la bola de plasma va más allá de la superficie del cristal. Al acercar el tubo fluorescente, la misma energía excita los átomos de mercurio que se encuentran en estado gaseoso dentro del tubo. Los átomos excitados emiten luz ultravioleta, la cual se absorbe en la capa de fósforo dentro del tubo fluorescente, convirtiendo la luz ultravioleta en luz visible.

Si después de que el tubo se ilumine, ponemos la mano en un punto posterior al de la entrada de la energía, veremos que el extremo del final no se ilumina. Esto se debe a que la energía se transporta por nuestro cuerpo y más tarde llega al suelo.

D. L. 2º ESO B