Saltar al contenido

Visor

ITALIA-ESPAÑA

por Camilla Cattaneo (1ºBach)

Al principio, cuando llegué a España en septiembre, fue muy difícil. No sabía hablar el idioma, no conocía a nadie y había muchas diferencias entre España e Italia.

Primero los estudios eran muy diferentes: en Italia hay tres años de ESO y cinco de liceo. Yo estaba en tercero del liceo de lenguas, pero cuando vine aquí, había diferentes opciones. He tenido que apuntarme en el bachillerato de ciencias, pero he descubierto que aquí las matemáticas, la física y la biología tenían un nivel más elevado. En Italia estudiaba muchos idiomas, inglés, francés, alemán y había estudiado muy poco las asignaturas científicas.

Luego tenía el problema del idioma. No entendía cuando los profesores hablaban y escribir en los exámenes era aún peor. Me habría gustado socializar con mis compañeros, pero no podía hacerlo.

Ahora, cuatro meses después, entiendo el idioma y puedo hablar mejor, y puedo decir que hay también muchos aspectos positivos en la escuela española. En Italia, en el liceo, se debe hablar a los profesores con la forma de cortesía, mientras aquí entre los profesores y los alumnos, hay una relación más informal que ayuda a trabajar mejor.

Además, los compañeros son más sociables que en Italia y esto me ha hecho sentir aceptada, no obstante yo no hablaba mucho con ellos.

También en la vida madrileña he encontrado muchas diferencias. Aquí se come mucho más tarde. Los italianos comen a mediodía y a las ocho de la tarde, mientras que en Madrid se come a las tres y a las diez.

Al final pienso que Madrid es una ciudad maravillosa, aunque yo esté acostumbrada a vivir en un pueblo pequeño. Hay muchas cosas que hacer y mucha gente que conocer.